Y el colectivo vecinal ya pone en liza la siguiente línea en su historia, lograr "un nuevo plan de rehabilitación integral" del casco antiguo de Ponferrada, en calles "que son parte del Camino de Santiago".
Son 25 años de movimiento vecinal que se fundaba en un momento clave para este barrio, corazón y génesis de Ponferrada. De todo ello, de su historia, da cuenta una muestra que desdde este viernes puede apreciarse en el escaparate de la Plaza de la Encina bajo los soportales. Fotos, hemeroteca, escritos... una lucha permanente que aún tiene metas por alcanzar.
Así lo explica el actual presidente de la asociación, que lleva siéndolo 17 años desde que sucediera a Lorenzo López Valcarcel. Se trata de Emilio Ruberte, quien considera que muchos de los objetivos originales del colectivo se han logrado, como "recuperar urbanísticamente la zona, dotarlo de infraestructuras modernas de saneamiento, luz, mobiliario... pero sobre todo poner en valor el Castillo", recuerda. Un hito que no es tan lejano en el tiempo como ahora pueda parecer. "Fue a finales de los 90', y entonces el castillo ya había pasado por la amenaza de ser declarado hasta cantera, pero seguía abandonado y con parte de los muros que se caían. Aún recuerdo el día en que se aprobaba el plan de actuación y se fueron eliminando todas las casas pegadas a la muralla", destaca emocionado.
Pero la satisfacción de lo conseguido no empaña lo que aún queda por lograr, que no es poco. "Aún quedan calles a recuperar, y no cualquier calle. Estamos hablando de El Rañadero, El Comendador... calles por donde pasa el Camino de Santiago, que es nuestro escaparate al mundo".
En este sentido el edil de Conservación y Patrimonio, Santiago Macías, ha recordado que el Ayuntamiento viene tratando con la Junta la declaración de un nuevo programa ARI para rescatar estas zonas del casco antiguo pendiente. "La Junta debe saber que no se puede cerrar la puerta a declarar nuevas áreas de rehabilitación integrales, porque no se ha terminado de recuperar la zona más valiosa de Ponferrada".
Presente también el rector de la Basílica de La Encina, Antolín de Cela, quien recuerda que "no hace tres décadas el barrio tenía problemas de marginalidad. La droga estaba en sus calles, los inmuebles estaban devaluados... pero hoy el valor de una casa aquí se ha multiplicado por ocho, es una zona hermosa y de paseo, y muchos ponferradinos querrían vivir en el casco antiguo".
Hoy lo hacen más de 3.000 personas, y aunque "hemos ganado gente joven en el barrio" Ruberte apunta la necesidad "de renovar y ampliar el número de socios", que actualmente son 300 "aunque los que pagan las cuotas... esos son menos". Por el camino se han quedado un centenar de socios fundadores de esta asociación de vecinos que componen una lista que es el epicentro del mural de la exposición.
Emilio Ruberte señala el listado de los socios desaparecidos