El proceso para cambiar una pantalla puede ser más o menos difícil en función del teléfono: "cada modelo tiene una forma de cambiarla, por ejemplo en los de alta gama el cambio es completo", asegura Pablo Llamazares, de Efecto Móvil. En estos casos la sustitución de pieza puede ser más engorrosa, puesto que hay que desmontar el teléfono. En todo caso y a pesar de las posibles dificultades, desde Efecto Móvil aseguran un plazo de reparación de 48 horas en el caso de las terminales más habituales, además de garantía de tres meses para las reparaciones y de seis para las piezas, aunque "si la pieza falla por ejemplo a los nueves meses me hago cargo igual", añade Llamazares.
Las piezas, por supuesto, son originales y de máxima calidad, como en todas las reparaciones realizadas en Efecto Móvil. El establecimiento, como distribuidor oficial de la marca española Bq, se dedica especialmente a ello.
Las averías pueden ser diferentes, pero por lo general el cambio de pantalla es completamente necesario, a no ser que sea un daño menor como un pequeño rayón. En ese caso puede pulirse, pero todavía no se ha encontrado un método efectivo. Lo cierto es, que aunque la pantalla se rompa, puede funcionar con total normalidad. "Puede ser una rotura superficial, pero en el 50% de los casos afecta al circuito táctil, que detecta cuando pulsas en la pantalla, por lo que el terminal no obedecería", explica Llamazares. La reparación de pantallas, además, se puede realizar en tablets.
Efecto Móvil se ocupa de otras reparaciones, como las relativas a los conectores de carga o las que tienen que ver con humedad, y también de ordenadores y consolas. Además, vende accesorios para móvil, teléfonos libres, reparación de software, recargas y liberaciones en su nueva localización en la calle Ancha, 12.
