Aunque Cuellas no ha confirmado que el proyecto esté parado, puesto que "será la Junta de Castilla y León la primera que tenga noticias", lo cierto es que sus palabras chocan con las del secretario de ICG, que en su día afirmó que "se han realizado trabajos en el terreno". Por ahora, el alcalde de Cubillos no ha visto ningún tipo de cambio en la parcela y hasta la zona no ha acudido maquinaria de ningún tipo para realizar trabajos en la misma. En teoría, la próxima comunicación que debería recibir el Ayuntamiento es la del proyecto de obra.
Las fechas se han ido sucediendo pero la realidad es que en la parcela sólo figura el cartel colocado el 29 de noviembre de 2014. Después la idea era comenzar a comienzos de 2015, después para este verano, y ahora se encara 2016 sin ningún atisbo de que los trabajos sean inminentes.
En diciembre del pasado año los ganaderos bercianos ya mostraron su desconfianza en la materialización de este proyecto, y expresaron sus dudas ante una demanda de 300 reses de vacuo diarias y hasta 1.500 de porcino. De hecho dejaron claro que no iban a preparar un incremento escalada de la cabaña hasta que el centro estuviera construido y en servicio. El tiempo parece haber dado la razón a su planteamiento precavido.
Características del proyecto
Cabe recordar que el macroproyecto contaba con unas previsiones de inversión de más de 50 millones de euros (10,8 millones dedicados a la obra obra civil, 14 millones a la instalación técnica y otros 19 millones a maquinaria) y crearía cerca de 250 empleos directos, con una repercusión económica superior a 25 millones de euros anuales. En total, la filial pretendía construir 34.000 metros cuadrados de planta productiva y una inversión de 50 millones de euros que se obtendría del rendimiento de unas 350.000 barquetas de 500 gramos, es decir, unas 175 toneladas de carne diaria envasada, etiquetada y lista para distribuir.
El cartel del proyecto sin los responsables de ICG, en el estado actual de la parcela