Fermentando en lías antes del degüelleDe nuevo las bodegas bercianas que elaboran vino espumoso, de forma natural, con las variedades Mencía, Godello y Doña Blanca, confirman las buenas previsiones para vender la totalidad de producción. Xamprada, Don Perejón o Ardayel ganan cada año más espacio en las Navidades.
Brindar, y hacerlo con un vino de la tierra, espumoso. Los hay brut, semiseco, rosados, blancos... una carta cada vez más amplia, y un recorrido cada vez con mejores perspectivas. La producción de cavas catalanes cede algo de terreno que los bercianos van ocupando. Estas son las propuestas para tu mesa.
Desde Palacio de Canedo, el mítico Xamprada, de las variedades blancas serán 15.000 botellas de Extrabrut, 10.000 del semiseco, y 2.000 del Extrabrut reserva, con más de 3 años en sus lías. Compuestos con las variedades Godello y Chardonnay. De los rosados, Extrabrut (2012) con 5.000 botellas, y semiseco también con 5.000 en el mercado (uvas de 2012). El rosado se compone con Mencía y Godello.
En todos los casos la crianza se hace sobre lías, y 1 año de espera para el degüelle de la botella. El rosado, más varietal, al estar 9 meses de crianza. El blanco, más refinado y aroma de crianza, sobre todo el reserva extrabrut.
Desde Vinos del Bierzo, la Cooperativa de Cacabelos, el histórico Don Perejón. Son 6.000 botellas de Brut, y otras 6.000 de semiseco.
Son espumosos con sabor intenso, uvas de 2013, con 9 meses de crianza, y dos fermentaciones, la primera en sus lías. Las dos variedades blancas se componen de Godello y Doña Blanca al 50%.
Y la divertida propuesta del Ardayel, que va creciendo año a año en producción, y este año estrena nueva imagen y nuevo producto.
La Cooperativa Viñas del Bierzo, de Camponaraya, pondrá en el mercado 6.000 botellas de blanco semiseco, compuesto con Godello y Doña Blanca (el año pasado fueron 4.000), y otras 1.000 del nuevo Rosado brut, hecho con Mencía.
Son uvas de 2013, con 9 meses de segunda fermentación , y que en su variedad blanca es muy redondo y aromático, y en su rosado muy frutal, con toques de cereza y fresa.
La imagen de la botella también es nueva, mucho más limpia, en la línea del vino Origen, marca estrenada este año por la cooperativa.
Todas las bodegas reconocen que la demanda crece año a año, llegando a agotar la producción, y copando cada vez más el mercado local. Una apuesta por lo nuestro.