El Ministerio Público solicita una pena de seis meses de cárcel para el profesor y otros seis de inhabilitación, así como el pago de una indemnización por valor de 3.000 euros por los daños sufridos por la alumna, que estudiaba en la Escuela Técnica de Ingeniería y Ciencias Agrarias de la Universidad de León.
Los hechos se remontan a los años 2006, 2007 y 2008, cuando la alumna, sufrió en varias ocasiones, presuntamente, las insinuaciones del docente. Con la intención de hacer más notables sus calificaciones, el profesor le habría propuesto a la estudiante aumentarle las calificaciones si accedía a cumplir sus intenciones. Tras comunicar la alumna estos hechos, fueron en 2010 puestos a conocimiento y disposición de la Fiscalía a través de la propia Universidad de León.