El oso toma la delantera en la carretera que une Colinas del Campo con Igüeña

Dos personas que circulaban la pasada noche del jueves por la carretera que une Igüeña con Colinas del Campo pudieron grabar el inesperado encuentro con un oso, que emprendió carrera

08 de Noviembre de 2015
Actualizado: 16 de Noviembre de 2015 a las 16:35
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Dos personas que circulaban la pasada noche del jueves por la carretera que une Igüeña con Colinas del Campo pudieron grabar el inesperado encuentro con un oso, que emprendió carrera a buen seguro más asustado que los vecinos.

En la pasada noche del jueves, dos personas que circulaban por la carretera que une las poblaciones de Igüeña con Colinas del Campo tuvieron la inesperada suerte de encontrarse con un oso que se cruzó en su camino para acompañarlos durante buena parte del trayecto. Aunque el animal no se dio la vuelta en ningún momento, les estuvo 'guiando' por la vía durante más de un minuto aprovechando la luz del vehículo y sin desviarse demasiado. Eso sí, cuando el animal se cansó de correr, decidió tomar otra vía adentrarse en el monte sin apenas girar la cabeza. En este vídeo que han facilitado a Infobierzo se puede ver perfectamente al ejemplar. Una de las jóvenes que iba en el coche, Olga Nogueira Marcos, no dudó ni un instante en tomar la cámara de su móvil para inmortalizar el momento.

Según narra la artífice de las imágenes, eran las 00.55 cuando regresaba a su casa, en Colinas del Campo, "y el animal, al ver las luces del vehículo, fue cuando decidió emprender la carrera". Ellos no fueron los únicos que visualizaron al oso esa noche por la zona, dado que detrás circulaban más vehículos que también se toparon con el ejemplar. No obstante, sólo Olga tuvo la suerte de poder captarlo tan claro.

No se trata de la primera vez que vecinos de zonas como el Alto Sil se encuentran con un animal de estas características, aunque casi siempre suelen hacer su aparición en montes y valles, dejando las carreteras para las horas nocturnas. En este caso, el pequeño oso pareció no haberse asustado ante la aparición del coche, que le iba siguiendo los talones a baja velocidad, pero tampoco dejó de correr en ningún momento. Se trata de una especie que ya es moradora habitual del Alto Sil, con 200 ejemplares controlados.

El último caso conocido de estas características fue en Palacios del Sil hace menos de un mes, durante la jornada de caza de un vecino que acabó con una sorpresa inesperada (con vídeo incluido).