Este balcón de la histórica calle del casco antiguo, de Milagros Álvarez, ha sido galardonado en el I Concurso de balcones de Ponferrada.
Un motivo para la vista, y también para el espíritu, según explica su autora, y cuidadora, Milagros Álvarez. Esta vecina del casco antiguo ha logrado que su balcón del número 9 de la histórica calle Pregoneros haya resultado ganador del I Certamen de Balcones engaladaos y floridos de Ponferrada, que englobaba en esta edición a los barrios de La Rosaleda y del casco histórico.
En total participaron 24 domicilios con sus balcones engalanados, y también resultaron premiados el de Purificación Canernero, en la Plaza de la Encina 14, y Mª Carmen Gundín, en la Plaza de la Encina 2.
"Este concurso hace que se valore la dedicación y el esfuerzo de estas personas que embellecen la ciudad" recalcaba la alcaldesa, Gloria Merayo, al tiempo que las galardonadas destacaban que "el mimo y cuidado que les ponemos a las flores nos lo devuelven de forma casi terapéutica".
En la página wewb de ayuntamiento se subirán las fotos y las localizaciones del resto de balcones participantes en la primera edición de este concurso, que desean se mantenga a lo largo de los próximos años. En este sentido, la presidenta del Patronato de Fiestas, confirmó que el año que viene volverán a convocar el concurso y que quieren unirlo a la realización de unos cursos de formación en plantas, jardinería y estética floral “porque hemos tenido esa demanda y también era lo que queríamos suscitar, a la vez que proponer esa mejora en la estética que ya existe y potenciarla”.
“Serviría para la formación de las personas, al tiempo que se fomenta que valoremos las plantas e, incluso, hasta como terapia para algunas personas, al tiempo que cumplimos con ese doble objetivo”, añadió María Antonia Gancedo.
Los premios han consistido en una percepción en metálico de 300 euros para la ganadora, 200 y 100 euro respectivamente. El jurado estuvo compuesto por la presidenta del Patronato de Fiestas, Mª Antonia Gancedo, el edil de Deportes, Roberto Mendo, el gerente de un vivero y dos responsables de floristerías de la ciudad.
