Fin a una mala campaña de setas con el 50% de la producción anual media

El director del Proyecto Micocyl de la Junta destaca que “ha sido un año atípico, irregular y poco productivo después de 2014 que fue el mejor año de los últimos 20”

28 de Noviembre de 2015
Actualizado: 02 de Diciembre de 2015 a las 20:45
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La campaña micológica en Castilla y León se cierra con un balance negativo, debido a su irregularidad y escasa producción, que se estima en niveles inferiores al 50% de un año medio, a pesar de que todavía los expertos no han finalizado los inventariados que permiten calcular la producción. En lo que respecta a El Bierzo, el presidente de la asociación Cantharellus, Manuel Bernardo Álvarez, destaca que "no ha sido una campaña tan mala, ha sido aceptable, lo que pasa es que el año pasado fue exagerado".

"Las dos últimas han sido muy buenas y este año ha sido algo peor, pero no es bueno acostumbrarse a lo bueno y luego quejarse cuando no llega una campaña excepcional", explica Álvarez, que recuerda que en El Bierzo, la campaña de recogida aún continúa. "Hay que salir al campo y hay que ser experto", recuerda el presidente de los aficionados bercianos a la micología.

“Ha sido un año atípico, irregular y poco productivo después de 2014 que fue el mejor año de los últimos 20”, destaca en esa línea el director científico del Proyecto de Micología de Castilla y León (Micocyl), Fernando Martínez Peña. Desde Cantharellus, Álvarez matiza que "este año ha faltado lluvia durante el otoño y buenas condiciones en la primavera; julio, agosto y septiembre fueron meses muy secos y el frío que llegó luego las asustó". “Las heladas de la última semana han sido normales para esta época del año, si bien en algunas zonas han podido ralentizar todavía más la fructificación”, puntualiza Martínez Peña.

La campaña micológica de 2015 está prácticamente a punto de finalizar, si bien todavía hay zonas, como la Comarca berciana, que siguen en producción particularmente de especies como lactarius deliciosus (níscalo). Martínez Peña detalló que las zonas más productoras al principio del otoño fueron Soria y Burgos, donde se produjo un fenómeno atípico de precipitación y temperaturas, que provocó el adelantó de la campaña un mes, principalmente de boletus edulis, registrando importantes valores productivos y buena calidad. Por el contrario a mediados y finales del otoño las zonas más productivas fueron Zamora y Salamanca, principalmente.

Castilla y León registró especies propias de esta época del año como los boletus grupo edulis, níscalos, seta de cardo, entre otras especies de interés comercial como angulas de monte y lengua de vaca, entre otras.