Aquellas personas que estén pensando en buscar ayuda en un centro para mayores, con el objetivo de que se ocupe durante el día de cuidar a un familiar mayor, disponen de una amplia oferta de Centros de día en León.
Pero ¿cómo estar seguros de que el centro escogido responde a nuestras expectativas y encaja con el estado físico y la personalidad del mayor?
Conozcamos tres consejos básicos que nos ayudarán a seleccionar el centro de manera acertada y rápida.
1. Utilizar un buscador especializado para realizar la preselección
En internet disponemos de plataformas web especializadas en la localización y contratación de residencias de ancianos, tanto permanentes como de día.
La ventaja de utilizarlos es que, además de permitirnos restringir la búsqueda a zonas muy concretas, estas plataformas web nos permiten ajustar los criterios de búsqueda a parámetros como:
- La edad de la persona
- Su estado de salud
- Su nivel de dependencia, si es que la hay
- La disponibilidad económica del anciano o de su familia
Adicionalmente, estas plataformas ofrecen asesoramiento gratuito personalizado a los solicitantes, así como la posibilidad de obtener descuentos en la contratación de la residencia o centro de día para mayores.
2. Prestar atención a estos factores cuando contactemos con los centros o visitemos sus portales web
Una vez preseleccionados algunos centros de día, esto es lo que tenemos que averiguar:
- Quién es el propietario de cada centro
- Si dispone de todas las licencias y autorizaciones
- Qué actividades están programadas para las personas que aún no son totalmente dependientes
- Cuál es la rutina de atención para personas totalmente dependientes
- ¿El centro de día ofrece servicios de recuperación funcional?
- Si hay personal sanitario permanente en la plantilla
- ¿Dispone el centro de día de medios de transporte aptos para ancianos disminuidos?
3. Visitar el centro de día antes de tomar la decisión definitiva
Antes de firmar nada, es imprescindible concertar una visita previa, con el fin de conocer el centro y entrevistarnos con los responsables. En la entrevista, la dirección del centro de día nos dará toda clase de seguridades acerca de la idoneidad del mismo.
Pero también tendremos que, tras darnos una vuelta por las instalaciones, hacer caso a nuestra intuición y plantearnos las siguientes preguntas:
- ¿Es amable el personal y parece mantener el buen humor mientras trabaja?
- ¿Está limpio el centro?
- ¿Se ven suficientes asistentes en las instalaciones o tenemos la impresión de que la dotación de personal es escasa?
- ¿Hay vida en el centro o percibimos un ambiente desangelado y triste?
- ¿Son las instalaciones modernas y confortables?
- ¿Qué impresión nos ofrece el comedor colectivo?
Tengamos en cuenta que, si no fallamos a la hora de escoger el centro de día, todo son beneficios: los familiares al cargo disponen de varias horas al día para descansar y están tranquilos de que sus familiares están bien cuidados.
Y por su parte, los ancianos ingresan en un entorno de socialización, actividades, movilidad y nuevas experiencias, algo que contribuye a mantenerlos en el mejor estado físico y psíquico posible.