Bodegas Cepa 21 reúne de manera virtual a más de 200 personas para la presentación de su nueva añada de 2017

12 de Marzo de 2021
Actualizado: 06 de Mayo de 2021 a las 11:43
Guardar
bodegas-cepas-21
bodegas-cepas-21


Bodegas Cepa 21, de la Denominación de Origen Ribera de Duero, reunió ayer de manera virtual a más de 200 personas de España y Latinoamérica para la presentación de su añada de 2017, un vino "repleto de la frescura, la innovación y la originalidad que definen a las propias bodegas desde que iniciaron su andadura en el mercado como apuesta de modernidad", según aseguró la bodega.  







El presidente de Cepa 21, José Moro, se mostró convenido que esta nueva añada iba a enamorar. “Este es uno de los proyectos más apasionantes de la historia de mi familia, de la familia Moro”, explicó al asegurar que, desde su nacimiento, buscó sentar las bases de la viticultura moderna en la Ribera del Duero. De ahí, su apuesta por la fusión de la tradición vitivinícola y la innovación que siempre ha acompañado a la bodega con el objetivo de elaborar vinos basados en el "terroir" propio de la zona, pero acordes a las nuevas tendencias. No en vano, la bodega, que hoy cuenta con 50 hectáreas, está dotada con la más alta tecnología que, en combinación con los rasgos de la tierra y sus características, ayuda a elaborar vinos con una personalidad única y armoniosa.  



 

 


 

 



 

 


Ver esta publicación en Instagram


 



 

 

 



 

 



 

 

 




 

 


 

Una publicación compartida de Bodegas Cepa 21 (@cepa21bodegas)






 


En palabras de José Moro, “conocer los factores diferenciales –como la altitud de los viñedos, entre 750 y 900 metros– y las singularidades de nuestra bodega, nos hará entender mejor el alma de nuestros vinos, y concretamente, de esta añada que presentamos hoy aquí: Cepa 21 2017”. A continuación, explicó cada proceso por el que pasa en su elaboración este vino de uva tempranillo de color cereza picota con ribetes granates. “Olfativamente, es un vino lleno de matices, con un equilibrio entre frescura y madurez. El conjunto aromático se ve enriquecido por las notas propias de un paso por barrica respetuoso y sutiles toques de especias y balsámicos”, explicó. En la fase gustativa, precisó, que se trata de un “vino estructurado y potente, de acidez equilibrada propia de la gran altitud de los viñedos de los que procede” y, sobre todo, “un recuerdo que nos invita a beber de nuevo”.

Moro contó durante la presentación con el chef de las Bodegas Emilio Moro, David Pérez, que explicó qué “manjares de la tierra” eran perfectos para acompañar este vino aromático, fresco y potente.