El entrenador de la Deportiva Ponferradina, Jon Pérez Bolo, compareció ante los medios después de la dura derrota (3-0) de su equipo frente a Las Palmas. El preparador vasco se mostró triste porque en otras ocasiones “el equipo siempre ha creído y ha querido darle la vuelta al marcador. El error en el penalti nos ha penalizado y nos hemos derrumbado”, analizó el míster blanquiazul, que añadió que “no hemos ni intentado darle la vuelta. Parecía que se había terminado”, lamentó.
Bolo, de hecho, consideró que “el partido estaba controlado, sin ocasiones. Al final, el resultado es 3-0, es abultado, pero lo que marca el partido es el penalti”, explicó el estratega vasco, que admitió que “en el segundo y el tercer gol nos suicidamos. El equipo estaba serio, contundente”, argumentó el preparador de Bilbao, que reconoció que “me voy triste porque no lo hemos intentado. El partido estaba controlado y todo dependía de que alguien se equivocara”, insistió el vizcaíno, que agregó que “necesitamos ganar. Si no ganamos, llegará un día en que jugaremos una final”, recalcó.
El técnico deportivista, sin embargo, no quiso achacar la derrota a la fatiga: “No creo que el equipo esté cansado. Acusamos esos golpes y no reaccionamos”, puntualizó el bilbaíno, que admitió que “no hemos sido los de otras veces queriendo darle la vuelta. La gente pensaba que estaba todo hecho y no”, aclaró Bolo, consciente de que “tenemos que tener la cabeza como la tenemos que tener. Tenemos que saber lo que somos, cómo hemos llegado hasta aquí”, resaltó el vizcaíno, que pidió tranquilidad: “No tenemos que ponernos nerviosos por tener que ganar un partido”.
De cara al encuentro del miércoles en El Toralín, Bolo dijo que “tenemos que salir contra el Lugo a ganar. Da igual lo que pase; no podemos cambiar nuestra forma de jugar independientemente de lo que suceda”, indicó el míster vasco, que insistió que “nos estamos equivocando mucho”. Ese choque, aseguró, lo va a preparar “con la máxima ambición, con ganas de hacer un buen partido. No podemos cometer errores, debemos ser reconocibles”, especificó el preparador bilbaíno, que volvió pedir confianza y tranquilidad: “Tenemos que tener los pies en el suelo”.