Castilla y León estudia un toque de queda para municipios y el cierre del ocio nocturno para luchar contra la quinta ola

El Ejecutivo podría aplicar medidas reforzadas para algunas provincias como Burgos o Zamora

13 de Julio de 2021
Actualizado: 14 de Julio de 2021 a las 12:21
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La consejera de Sanidad informa sobre la situación epidemiológica en Castilla y León
La consejera de Sanidad informa sobre la situación epidemiológica en Castilla y León


Los técnicos y servicios jurídicos de la Junta de Castilla y León estudian la aplicación de un toque de queda o restricción de la movilidad nocturna para algunos municipios con una incidencia acumulada de COVID-19 muy elevada. Esta medida adicional, junto a otras, como el cierre del ocio nocturno, se estudiarán en el Consejo de Gobierno del próximo jueves, 15 de julio, según avanzó este martes la consejera de Sanidad, Verónica Casado.

En su comparecencia para analizar la situación epidemiológica, Verónica Casado indicó que se estudian medidas adicionales, que concretó en el toque de queda, después de que la Generalitat Valenciana haya logrado el aval judicial para restringir la movilidad durante la noche en algunas zonas.

Ante este escenario, la titular de Sanidad expuso que se está valorando un toque de queda nocturno pero teniendo en cuenta la “proporcionalidad” de la medida, en función de los contagios y para determinados municipios y horarios. Además, recordó que en dos ocasiones el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) denegó esta posibilidad a la Comunidad al tratarse de la restricción de un derecho fundamental.

Verónica Casado indicó que también se analiza un posible del cierre del ocio nocturno, pero recalcó que ha pasado poco tiempo desde que el viernes pasado se implantara una reducción del horario hasta las dos de la madrugada. Insistió en que es pronto para evaluar el impacto de esta medida y dejó la puerta abierta a profundizar en las restricciones.

Además, la consejera indicó que el próximo jueves se revisará la posibilidad de que algunas provincias retrocedan al nivel dos de alerta sanitaria por el riesgo generado por el COVID-19. Entre ellas, afectará a Burgos y Zamora, dos de las que tienen más incidencia acumulada. Además, Verónica Casado indicó que se reforzarán algunas restricciones y se ampliarán otras, como el consumo en terraza que podría llegar al 100%.

La titular de Sanidad descarto que toda la Comunidad regrese al nivel dos, porque reiteró que se penalizan a sectores que no son el foco de los contagios ya que en su opinión la quinta ola tuvo su inicio en el ocio nocturno regulado así como en el irregular, como se refirió a las celebraciones, fiestas y botellones. Por ello, pidió a los ayuntamientos que se refuerce el control sobre estas concentraciones y que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado apoyen a las policías locales en estas tareas.