La vista que había sido fijada para el 3 de julio se suspendió debido a un recurso interpuesto por la empresa, sin embargo, no ha sido aceptado por la sala, por lo que se continuará con el proceso judicial.
Desde la sección sindical aseguran que "tras muchos intentos por parte de los delegados de evitar esta situación en reuniones con la empresa sin éxito y tras los parones llevados a cabo entre mayo y junio, la judicialización de esta situación ha sido inevitable".
Ahora será la sala de lo social la que determine si, tal y como defiende el comité de empresa, se trata de una modificación sustancial de las condiciones de trabajo, como ya reconoció inspección de trabajo.