El diputado nacional del PP, Eduardo Fernández, lamenta que desde las filas del PSOE, ahora exista una incomprensible templanza "cuando tenemos al primer ministro de Energía que apuesta sin fisuras la continuidad del carbón".
Para ello marca como punto de inflexión este pasado invierno, cuando la dependencia de materias energéticas renovables encareció el recibo a niveles de récord.
En este sentido contrapone los caminos opuestos del PP y PSOE, y aclara que "ahora existe una total sintonía entre el PP de León y de Castilla y León, con la postura de defensa del carbón desde la dirección nacional del partido", mientras que en el PSOE se produce el camino contrario. Precisamente el vicepresidente provincial del PP y alcalde de Páramo del Sil, Ángel Calvo, reseñó que algunos representantes municipales del PSOE en la provincia "ahora no entiende por qué su partido no tiene una postura clara y decidida en defensa del carbón" desde Madrid. "No entienden por qué no defienden que un cambio en el reglamento en materia energética no se convierte en rango de Ley, que tiene mayor peso".
Así las cosas, Eduardo Fernández quiso avanzar algunas de las novedades en las que trabaja el Gobierno para evitar a nivel político el cierre prematuro de las centrales térmicas -las más importantes en Teruel y Compostilla-. "Es necesario un apoyo parlamentario para propiciar un cambio de la Ley en materia energética que impida que la decisión de cerrar una fuente de producción, dependa únicamente del interés de una empresa, y el Estado no tenga nada que decir".
En este sentido, el PP lamenta que el ministro Álvaro Nadal y los representantes Populares, trabajen por ahora limitados en un cambio normativo "que siempre tiene un rango menor que la Ley" para complicar la decisión de cerrar las centrales térmicas que operan con carbón nacional aludiendo a una falta de competitividad y más tras la negativa a acometer las inversiones necesarias para cumplir con la normativa de Europa que marca el cierre para 2023 de las térmicas que no se adapten (o antes si gastan 17.500 horas de funcionamiento).
"Lo ideal sería contar un gran acuerdo parlamentario para impulsar un cambio de la Ley, pero desde el PSOE llevan dos meses callados, metidos en la madriguera, y se nos está yendo el tiempo".
Actualmente desde el Ejecutivo recopilan informes de Red Eléctrica para el cambio normativo, que evidencien que "existe un riesgo de desabastecimiento, porque ya se vio en enero que las renovables no siempre abastecen la demanda; y también se incrementa la dependencia energética externa". Asimismo los informes para el cambio normativo también recogerán "evaluaciones" de mercado que reflejen el "impacto que tendrá para el consumidor el cierre de las centrales térmicas", es decir "que factura de la luz, como ya pasó este invierno, se dispara su el carbón desaparece del mix".
Es más, los parlamentarios del PP creen que es un momento clave para mostrar una postura de Estado, puesto que "en Europa se empiezan a ver cambios de posturas respecto a la protección de fuentes autóctonas que eviten el riesgo de desabastecimiento eléctrico, como han recogido los últimos informes del CES (Consejo Económico y Social de la Unión Europea).