Al respecto, el alcalde señaló que este órgano consideró que la evolución de la pandemia, el lugar escogido, la previsible concentración de gente y la larga periodicidad del evento desaconsejaban su celebración en la plaza del Ayuntamiento, por lo que se propuso una ubicación alternativa, en el aparcamiento de la calle Obispo Osmundo, que fue rechazada por las asociaciones de libreros. “Si se puede ayudar sin que se comprometa la salud pública, ayudemos”, recalcó Ramón.
Respecto al cierre interior de la hostelería, el alcalde destacó que “hay que ayudarles y hay que hacerlo ya, las ayudas no pueden retrasarse”. Después de que la Asociación de Hostelería del Bierzo reclamase al Consistorio que se posicione en contra de esta medida, Ramón apuntó que eso sólo serviría para “dividir a la ciudadanía y generar incertidumbre”. “Nunca vamos a ir en contra de decisiones informadas por especialistas en la materia”, señaló.
En el mismo sentido, respondió a la solicitud del colectivo para llevar a cabo cribados masivos que sirvan para aislar los casos positivos. “Estoy seguro que los profesionales de la hostelería saben mucho de lo suyo, igual que los profesionales de virología y salud pública saben de lo suyo”, zanjó.