La Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Ponferrada informa de que esta mañana, con motivo de una competición de salvamento y socorrismo celebrada en las piscinas del complejo Lydia Valentín, y en la que participaban menores, se ha prohibido a los padres de los participantes el acceso a las instalaciones para asistir a la competición, lo que ha provocado su malestar, llegando incluso a llamar a la Policía Municipal.
Dicha prohibición tiene fundamentalmente dos causas, explica la Concejalía, primero, "evitar la grabación de vídeos y fotografías de las personas que estaban usando en ese momento la piscina. Esas usuarias y usuarios no eran exclusivamente participantes en la competición, sino que esta utilizaba únicamente dos calles del total de calles existentes. Los usuarios del resto de calles han protestado en otras ocasiones ante el hecho de que se les grabe en la piscina sin su consentimiento."
Y, en segundo lugar, "el acceso a las gradas de las piscinas puede comportar en estos momentos riesgo, debido al desprendimiento de partes del enlucido del techo de las instalaciones por la concentración de humedades, que reblandecen los materiales, un proceso que la Concejalía de Deportes está ya afrontando para solucionarlo."
Por otro lado, desde la Concejalía explican que "aunque se hubiera reservado toda la piscina en exclusiva para la competición, tampoco se podría grabar a los menores, pues sería preciso un permiso por escrito de cada padre y cada madre para poder tomar imágenes sin vulnerar los derechos de imagen de los menores."
Así pues, justifican que "ante la imposibilidad de poder controlar el uso de dispositivos de grabación por parte del personal de las piscinas, se decidió impedir la entrada al recinto a todas aquellas personas que no participaban en la competición o en las actividades natatorias."
La Concejalía de Deportes lamenta las molestias causadas a los padres, así como que no se les hubiera informado previamente de esta circunstancia y pide disculpas, pero incide en que la decisión adoptada es "la más aconsejable para evitar eventuales vulneraciones de derechos de los menores que participan en las pruebas y del resto de usuarias y usuarios de las piscinas."