Como consecuencia, se les ha seguido exponiendo deliberadamente a la misma sustancia que, en teoría, debería alejarlos del taller”, denuncia Gabriel Garnelo, presidente del comité de empresa
y delegado por USO. Esta situación extremadamente grave y ocultada por la empresa en un primer momento, podría haberse evitado si la compañía hubiera tomado las medidas preventivas adecuadas. Las causas fundamentales, según Garnelo, son el deficiente estado de las instalaciones de aspiración y captación de estireno, así como el nulo seguimiento, promovido de los responsables del taller, del sistema de rotaciones definido por la propia compañía.
Por otra parte, se están realizando tareas de reparaciones y acabado en la nave de montaje, instalación sin sistema de captación de estireno ni de aspiración, así como en una carpa portátil, abierta y sin esos sistemas de seguridad lo que implica que “esos residuos y vapores se están derivando al medioambiente. Esta situación ha sido puesta en conocimiento de la Inspección de”, añade Garnedo.