El titular de Industria, que faltó a la cita de la firma del Plan, ya se ha referido al nuevo Plan vigente tan pronto como Bruselas lo valide. Después, apunta, el carbón y el Gobierno mirarán hacia un hipotético cambio de planes de la U.E con la minería para 2019.

"No ha sido fácil, pero todas las partes hemos cedido para alcanzar un acuerdo, dentro de lo que son los márgenes que nos permiten los recursos financieros disponibles", apuntó el ministro. Es decir, es hasta donde el Gobierno podía llegar.

Ahora, el ministro no elude que el camino está marcado hasta el 31 de diciembre de 2018, pero antes, desde ya, toca hacer política en Europa para mutar el plan de cierre del sector. "Seguimos con la idea de que la explotaciones mineras que puedan ser rentables y competitivas, puedan seguir abiertas, hayan recibido ayudas o no; pero para ello tenemos que contar con el visto bueno de la UE" que por el momento detalla en su hoja marco que las empresas mineras que reciban ayudas en ese plan 2013-2018 tendrán que cerrar en 2019. La patronal minera, por su parte, y como defiende el Estado español, creen que las compañías utilizarán los fondos para modernizar sus procesos productivos, por lo que muchas en 2019 podrían ser viables sin ayudas públicas a la producción, que en todo caso se terminarán con el 2018.