La Delegación del Gobierno en Canarias se ha limitado a informar del hallazgo, en un escueto comunicado, en el que solo se menciona la aparición de un cuerpo. El Tribunal Superior de Justicia de Canarias ha comunicado que la magistrada titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Güímar finalizó sobre las 20.00 horas del jueves el levantamiento del cadáver de la niña, de seis años, a falta de pruebas forenses más determinantes, según informó Europa Press.
Fuentes próximas a la investigación habían explicado poco antes a Efe que se han encontrado dos bolsas, en una de ellas estaba el cuerpo -que podría ser de la hija mayor, Olivia, de 6 años- y la otra estaba vacía. En un primer momento se apuntó a que el padre y la otra pequeña estaban localizados en el fondo marino, sin embargo, este extremo no ha podido ser confirmado.
El importante hallazgo fue comunicado ya a la progenitora de las niñas, Beatriz Zimmermann, así como a la familia paterna de las pequeñas.
El barco 'Ángeles Alvariño' continúa a esta hora de la mañana en la zona donde, en el día de ayer, fue hallado el cuerpo sin vida de Olivia para tratar de encontrar a su hermana Anna, de tan sólo un año, y su padre, Tomás Gimeno, que presumiblemente se habría suicidado lanzándose al mar después de acabar con la vida de las pequeñas.
El radar de barrido lateral y un robot marino con el que está equipado el buque oceanográfico, han sido de importancia vital para encontrar, primero, una botella de buceo y una funda nórdica propiedad de Tomás y, finalmente, el cuerpo de Olvia.
En la mañana de este viernes el buque se encuentra a unas tres millas náuticas del puerto de Santa Cruz de Tenerife, en la misma zona donde se produjo la última conexión con el teléfono móvil de Tomás y donde ha permanecido prácticamente desde su llegada a la isla.