Así lo manifestó el vicepresidente y portavoz al informar, junto a la consejera de Sanidad, Verónica Casado, de las medidas acordadas por el Consejo de Gobierno extraordinario en relación a la gestión del coronavirus, con unas acciones para el foco de la zona de Miranda de Ebro (Burgos) y otras para el resto de la Comunidad.
Una de las recomendaciones de la Junta de Castilla y León es que los ciudadanos eviten los lugares concurridos y las aglomeraciones en las que no se puedan mantener la distancia de un metro de seguridad, donde se encuentran los actos litúrgicos de la Semana Santa.
En el caso de Miranda de Ebro se suspenden esos actos de carácter litúrgico y en el resto de la Comunidad se verá en función de la evolución de esta epidemia, explicó el vicepresidente y portavoz, que, ante las preguntas de los periodistas, dado que se recomienda evitar las aglomeraciones, reconoció que se puede pasar de lo que ahora es una recomendación a una obligación.
No obstante, tampoco precisó cuando era medida sería efectiva aunque reiteró que es “bastante probable” que los actos de la Semana Santa se suspendan en la Comunidad.