La climatología está afectando una año más a la Cereza del Bierzo, con cambios drásticos de temperaturas, heladas a destiempo, sol y lluvias que están llevando a una producción irregular y problemas en la floración y cuajado del fruto que tendrán como consecuencia una merma de producción en algunas zonas. Así lo advierte el director técnico de las frutas de calidad del Bierzo, Pablo Linares, que puntualiza que todavía es pronto para cuantificar esas pérdidas porque "todavía pueden pasar muchas cosas".
Linares señala que la cosecha será más escasa en las zonas bajas, a las que ha afectado más estos cambios de tiempo, mientras que en las zonas altas y de ladera el árbol está respondiendo bien con una previsión de una producción más alta y mejor distribuida. A este respecto, puntualiza que dentro de la misma zona se aprecian esas diferencia como en Toral de Merayo, Rimor o en Corullón, con situaciones completamente diferentes entre el entorno del río y las partes altas.
El tiempo ha "vuelto loco" al árbol. Y es que la climatología ha llevado incluso a que se hayan registrado varias floraciones, con momentos distintos de flor y cuajado en el mismo árbol. "Ahora la cereza está verde, en tamaño aceituna", apunta el director técnica, que insiste en que hay que esperar a ver cómo evoluciona el tiempo para evaluar y cuantificar cuanto afectará a la producción de la campaña de Cereza del Bierzo.
Las lluvias y las heladas han afectado a la flor y al cuajado del fruto.