La DGT invitó a los ayuntamientos a sumarse a la misma de modo que también en las vías urbanas se realice esta labor de concienciación y control de la velocidad, teniendo en cuenta que en las ciudades, los peatones son los usuarios que más fallecidos registran y la velocidad la principal causa de ellos.
La DGT informó de que incluirá en la nueva Ley de Tráfico, Circulación de Vehículos a motor y Seguridad vial una reducción genérica de la velocidad en carreteras convencionales. Gregorio Serrano, director de la DGT, destacó que “la idea es que la totalidad de estas vías tengan un límite de velocidad de 90 kilómetros por hora, límite que los titulares de estas vías podrían elevar a los niveles que consideraran razonables, atendiendo a la conservación y trazado de la misma”.
“La evidencia científica y los accidentes que cada día se producen en nuestras carreteras nos llevan a reducir la velocidad como medida necesaria si queremos reducir la siniestralidad y el dolor de miles de familias”.