El Tribunal de la Rota de la Nunciatura Apostólica resolvió la investigación abierta hace casi tres años por el Obispado de Astorga contra el sacerdote Ángel Sánchez Cao, con una condena que le impedirá ejercer cargos que impliquen el contacto habitual o esporádico con menores de edad hasta que cumpla los 80 años. El proceso administrativo penal desarrollado de acuerdo con el Código de Derecho Canónico concluye que el párroco fue responsable, en el año 1980, de abusos a menores en el Seminario de La Bañeza.
Al respecto, cabe recordar que en enero de 2019, el Obispado de Astorga apartó cautelarmente a Sánchez Cao de las parroquias después de recibir “noticias fundadas” sobre los presuntos abusos cometidos por el sacerdote y ordenó la apertura de una investigación preliminar para esclarecer los hechos. El sacerdote ya había sido investigado por denuncias relacionadas con otros presuntos delitos similares cometidos con anterioridad.
A pesar de que los casos conocidos estaban prescritos civil y canónicamente, la Congregación para la Doctrina de la Fe levantó la prescripción de los delitos para seguir adelante con el proceso sobre unos hechos calificados de “execrables”. “Esta Iglesia particular lamenta profundamente estos hechos y reitera su petición de perdón por el grave daño causado a las víctimas en su desarrollo humano y cristiano”, señalaron fuentes de la Diócesis, que destacaron su compromiso por la protección de menores y en la lucha contra los abusos sexuales. “Seguiremos trabajando activamente para que los espacios eclesiales sean lugares seguros”, concluyeron.