El obispo Julián López señala que comparte “el profundo dolor que causa esta noticia en todas las personas de buena voluntad, que desgraciadamente se viene a sumar a otras situaciones semejantes que han acabado con la condena de los acusados y, en algunos casos, con el sobreseimiento de las causas”. Añade, además, que la gravedad de las acusaciones exige “mantener inicialmente reserva sobre el asunto y respetar siempre la presunción de inocencia de los acusados, sin que ello impida llegar a adoptar algunas resoluciones concretas”.
También pide a los fieles cristianos que oren para que "se haga la luz suficiente" para la resolución de este caso, “para que todos nos esforcemos por ser coherentes con el respeto que se debe a la dignidad de todo ser humano y para que el Señor conceda a su Iglesia santidad y honradez de costumbres en todos sus miembros”.