La operación Baco 2019, a través de la cual se descubrió el fraude de una organización delictiva dedicada al embotellamiento y venta de vino DO Bierzo de manera masiva y fraudulenta, se hacía pública este lunes. El sargento del Seprona encargado de dirigir dicha acción, desveló que el vino llegaba al Bierzo desde el sur de España y se vendía en el extranjero a un alto precio, según apunta la emisora SER-Bierzo. Ese era el negocio fraudulento ideado por un grupo empresarial orensano y desarticulado por el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil.
La organización había alquilado una bodega del Bierzo que les sirviese como tapadera para poder vender vino con las etiquetas de la Denominación de Origen y de la Indicación Geográfica Vinos de la Tierra de Castilla y León. De tal forma que el producto se revalorizaba en busca de un cliente dispuesto a pagar por una etiqueta de calidad, según explicó el sargento.
Los cuatro detenidos operaban a través de las empresas Compañía Europea Exportadora de Vinos y P.H.G, según informa Radio Bierzo. Están acusados de presuntos delitos de estafa continuada, fraude, falsificación, utilización ilegítima de marcas de calidad y blanqueo de capitales.
La operación se inició en diciembre de 2018, cuando el Consejo Regulador Denominación de Origen Bierzo denunció ante la Guardia Civil irregularidades detectadas en varias contraetiquetas del vino que se encontraban en el mercado. La 'banda' puso a la venta en el mercado nacional e internacional aproximadamente 2.000.000 millones de botellas para hacerlas pasar por vino de la Denominación de Origen Bierzo e Indicación Geográfica Protegida de Vino de la Tierra de Castilla y Léon. A partir de ese momento, los agentes realizaron numerosos controles del vino dispuesto para la venta en establecimientos comerciales, detectando irregularidades en varias marcas comerciales por lo que se procedió a la inmovilización cautelar de cerca de 8.000 botellas de vino en diferentes provincias.