*En la imagen, señaladas Paulina y Trini sobre el mapa de concesiones de CMC y la vista satélite del Google Maps.
La Confederación Hidrográfica Miño Sil (CHMS) enviará en las próximas semanas los informes requeridos por la Junta de Castilla y León que permitirán avanzar en la evaluación ambiental de los dos proyectos mineros presentados por el empresario berciano Manuel Lamelas Viloria para las concesiones de explotación Paulina y Trini, que pertenecían a Coto Minero Cantábrico (CMC). Según informan desde la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, la documentación de ambos se encuentra en el Servicio Territorial a la espera de tramitar la parte ambiental del proyecto de explotación.
"No es posible avanzar en la evaluación ambiental porque falta documentación, fundamentalmente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil", apuntan esas mismas fuentes. Así, desde CHMS confirman que están siendo ultimados y que remitirán los informes en las próximas semanas. De esta manera se daría un paso más en la solicitud realizada por el grupo Viloria, que planteó esta vía para mantener la actividad minera en la comarca de Laciana al no poder seguir con la mina La Escondida de Hijos de Baldomero García (HBG) y tras fracasar las negociaciones con el Ministerio de Transición Ecológica para la devolución de las ayudas que exige la normativa europea que marcaba el cierre de la minería no competitiva el 31 de diciembre de 2018.
Según los datos del Servicio Territorial, hace ya tres años que Lamelas Viloria solicitó el cambio de titularidad para Paulina a través de la empresa Asistencia, Montajes y Estudios SA (Amesa) -de la que es administrador único- y desde hace casi dos, en mayo de 2017, la documentación se encuentra en el Servicio Territorial de Medio Ambiente para tramitar la parte ambiental del proyecto. La concesión de Paulina -ubicada entre La Escondida y María- empezó a ser explotada en los años 20 por Baldomero García y sus intalaciones se ubican en la salida de Caboalles de Arriba.
En lo que respecta a Trini, la solicitud entró en septiembre de 2016 y también está pendiente en el Servicio Territorial de Medio Ambiente desde junio de 2018. Esta concesión está ubicada más al norte, a la entrada de la braña de Caboalles de Abajo, donde se ubicaban las antiguas minas del Xaral.