Esta decena de lotes se encuentran en los municipios de Ferreras de Arriba, Ferreras de Abajo, Mahíde, Tábara, Villardeciervos, Otero de Bodas, y Figueruela de Arriba; algunos se sitúan en entidades locales menores, como Litos y Villanueva de Valrojo, y anejos, como Boya, Val de Santa María, Villarino Manzanas, Figueruela de Abajo y Moldones. Otros dos lotes han quedado desiertos y corresponden a Riofrío de Aliste y Ferreruela, que se volverán a subastar en un nuevo procedimiento.
El destino de los fondos obtenidos de la licitación efectuada será, de conformidad con la Ley de Montes de Castilla y León, un 70 por ciento del importe de adjudicación directamente a los ayuntamientos afectados titulares de los montes para el ejercicio de sus competencias, y el 30 por ciento restante se destinará al Fondo de Mejoras, que deberá ser reinvertido por el propio Ayuntamiento, con el asesoramiento del Servicio Territorial de Medio Ambiente, en mejoras del Monte de Utilidad Pública (MUP).
Estos procesos de licitación de urgencia se basan en las órdenes dictadas por la Junta de Castilla y León para la extracción de la madera quemada tras los fuegos de este verano en la provincia zamorana. La obligatoriedad de la extracción de la madera quemada afecta a toda la madera de pino, tanto a la existente en terrenos municipales como a la de terrenos comunales o particulares.
Estas órdenes para la extracción de las masas arbóreas afectadas por los fuegos tienen la finalidad de evitar la afección de plagas a otras masas de árboles sanas que no se han visto afectadas por los incendios. Tras los incendios una de las consecuencias más graves es la vulnerabilidad del terreno y de la masa forestal al ataque de las plagas, en concreto, el mayor potencial dañino lo prestan dos insectos (el Ips sexdentatus y el Monochamus galloprovincialis), que actúan como vector del nematodo de la madera del pino, considerado actualmente como el organismo más peligroso para los pinares a nivel mundial.
La Junta mediante la corta y venta de la madera, aparte de solucionar el problema fitosanitario y ambiental, trata de paliar los perjuicios económicos sufridos por los ayuntamientos afectados por los incendios de la provincia zamorana ocurridos en los meses de junio o julio, que tenían en los beneficios por la venta de madera de sus montes un importante remanente de ingresos. De hecho, una gran parte de la superficie quemada es propiedad de los ayuntamientos y es gestionada en colaboración con la Junta de Castilla y León a través de los Montes de Utilidad Pública (MUP).
La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio ha aplicado la máxima celeridad en la tramitación administrativa de las dos órdenes relativas a la saca de la madera quemada para su extracción en los montes de Zamora afectados por los incendios forestales con las garantías jurídicas necesarias en un procedimiento de la administración pública. El objeto de esta premura ha ido en beneficio de facilitar la corta efectiva de pinos para evitar otros daños al medio ambiente en las localidades zamoranas dañadas por los fuegos, explican fuentes de la Junta en un comunicado.
