La Junta ultima el informe para remitir a la UNESCO la petición de reconocimiento a la iglesia mozárabe de Peñalba como Patrimonio Mundial

La iglesia de Santiago de Peñalba continúa su camino para ser reconocida como Patrimonio Mundial de la UNESCO, incluida en el proyecto que lidera la Junta de Castilla y León para que la arquitectura mozárabe de la Península Ibérica se integre en esta lista.

12 de Junio de 2019
Actualizado: 29 de Junio de 2019 a las 12:41
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Iglesia Mozarabe Peñalba de Santiago 2019 650
Iglesia Mozarabe Peñalba de Santiago 2019 650
 



La iglesia de Santiago de Peñalba continúa su camino para ser reconocida como Patrimonio Mundial de la UNESCO, incluida en el proyecto que lidera la Junta de Castilla y León para que la arquitectura mozárabe de la Península Ibérica se integre en esta lista.

Según las últimas informaciones facilitadas por la institución autonómica, están ultimando el informe para enviar a la UNESCO y que proceda al análisis de la candidatura. Este paso viene precedido por la aprobación unánime del proyecto por los representantes de las comunidades autónomas y del Ministerio de Cultura y Deporte el pasado mes de diciembre. Junto a Castilla y León, a la iniciativa se han adherido Galicia y Castilla La-Mancha; y Andalucía, Extremadura, La Rioja y Cantabria han manifestado su compromiso de participación.

Si la iglesia de Peñalba finalmente fuese reconocida como Patrimonio Muncial, este título se añadiría al de Bien de Interés Cultural (BIC), que el monumento ostenta desde el año 1931, siendo una de las joyas arquitectónicas del Bierzo en general y de la Tebaida Berciana en particular. 

Situada en Peñalba de Santiago (Ponferrada), en pleno Valle del Oza, fue construida en el siglo X (entre los años 931 y 937) y ejemplifica la arquitectura mozárabe por la concordancia y confluencia procedente de los mecenas cristianos (que apadrinaban la construcción de templos) y los maestros islámicos o formados en Al-Andalus (que construían los templos dejando su huella).

Tras un largo proceso de tramitación de años, si la UNESCO reconociese la arquitectura mozárabe de la Península, Castilla y León sumaría un nuevo Bien Patrimonio Mundial a los once con los que ya cuenta. De ellos, 8 son de carácter material, 2 de carácter inmaterial y uno natural. Desde que la Junta ostenta competencias plenas en materia de patrimonio cultural, esta lista ha ido enriqueciéndose por la incorporación de lugares como los yacimientos de Las Médulas, Atapuerca y Siega Verde. También con la declaración de la Dieta Mediterránea y la Cetrería como Patrimonio Cultural Inmaterial. Y más recientemente, la incorporación de los Hayedos de Canal de Asotín y de Riofrío de Riaza, en Segovia.

Arquitectura mozárabe

Elementos distintivos de esta arquitectura, con una clara raigambre islámica, son la utilización generalizada de arcos de herradura, frecuentemente enmarcados por alfices en el caso de puertas y ventanas; la situación de los accesos principales a los templos en los muros laterales; la sujeción de los aleros de las cubiertas con modillones labrados en piedra; la construcción de bóvedas gallonadas, nervadas y vaídas; la escultura arquitectónica animalística y vegetal, tallada a bisel y trépano o la ornamentación pictórica geométrica y/o vegetal, a veces con despieces bícromos.

Junto a la de Peñalba, otros de los ejemplos arquitectónicos de la arquitectura mozárabe en la Comunidad son el Monasterio de San Miguel de Escalada (León), la Ermita de San Baudelio de Berlanga de Duero (Soria) o la Iglesia de San Cebrián de Mazote, en Valladolid.