El delegado sindical del CSIF (Central Sindical Independiente y de Funcionarios), José Luengos, se muestra cauto hasta conocer los detalles de la propuesta, si bien no esconde que la gestión directa del servicio tendrá que suponer modificaciones de las condiciones de la plantilla, principalmente en la vía de acceso al puesto de trabajo. Y es que los trabajadores ya acogieron en su día con recelo la propuesta en este sentido planteada por PSOE y Ponferrada en Común, rechazada en Pleno. "Ellos (en alusión a estos dos grupos) nos decían que la plantilla iba a seguir, pero de salir adelante tendrá que haber una oposición", advierte Luengos.
Fue el pasado viernes cuando el Ejecutivo municipal explicó que el edil de Movilidad y Transportes había firmado dos días antes la tramitación del expediente para la gestión directa por parte del Consistorio del servicio de autobuses urbanos para su aprobación y debate en el Pleno del próximo mes de septiembre. El caso es que el servicio se encuentra en situación de alegalidad desde 2012, fecha en la que expiró la concesión a la UTE (Unión Temporal de Empresas) Aupsa-Begar. El TUP está generando un déficit anual del orden del millón de euros, que se afronta desde las arcas municipales con reconocimientos extrajudiciales de crédito.