El Centro de Coordinación Operativa Integrada (Cecopi) reunido este miércoles para analizar y actualizar la situación del incendio declarado en el municipio leonés de Boca de Huérgano informó de que el fuego tiene una superficie de unas 900 hectáreas y su perímetro alcanza los 20 kilómetros.
El Puesto de Mando Avanzado del incendio que en la tarde fue declarado como de nivel 2 de peligrosidad del Infocal (Plan de Protección Civil ante Emergencias por Incendios Forestales en Castilla y León) por posible peligro para las personas y los bienes de naturaleza no forestal comunica que las localidades más próximas a la zona afectada no corren peligro.
El plan actual de actuación consiste en la organización de los medios aéreos de forma escalonada, de tal manera que durante todo el día puedan estar trabajando, respetando la normativa de aviación civil en cuanto a tiempos de descanso y de vuelo. Además, se ha distribuido personal de tierra por todo el perímetro para realizar labores de extinción.
Las tareas se centran fundamentalmente en la zona sur y oeste del incendio, buscando su estabilización. El personal desplegado en la zona norte vigila y contiene el incendio extremando las medidas de seguridad, debido a la dificultad y peligrosidad del terreno.
Fuentes de la Junta recuerdan que se trata de un incendio en el que la orografía ha impedido las actuaciones por la dificultad del acceso y la mecanización de los trabajos de extinción. Las condiciones meteorológicas tampoco han sido favorables, por la sequía acumulada, las altas temperaturas y los vientos fuertes.
En la zona se encuentran efectivos del operativo de incendios de la Junta, Brigadas de Refuerzo de Incendios Forestales, Brif, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, la Unidad Militar de Emergencias (UME) asistidos por camiones, máquinas, helicópteros, aviones anfibios y un avión de coordinación y observación.