Las víctimas mortales en accidentes de motos se reducen un 60% en las carreteras de la Comunidad pero León encabeza la lista

24 de Junio de 2017
Actualizado: 06 de Julio de 2017 a las 17:54
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Las víctimas mortales en accidentes de motos se han reducido en la última década en las carreteras de Castilla y León un 60 por ciento, al pasar de los 40 fallecidos en el año 2007, a los 16 contabilizados el pasado año, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT). Esta caída ha sido similar a la registrada en el conjunto de los siniestros de tráfico, dado que de las 304 víctimas de hace diez años se ha pasado a las 124 de 2016, lo que supone una caída del 59,2 por ciento.

No obstante, 2007 fue un año negro para los motoristas en Castilla y León, dado que desde entonces los peores años fueron 2015, con 25 víctimas y 2010, con 23. Por el contrario, en 2014 la cifra bajó a ocho, en 2013 se contabilizaron once y uno más en 2011.

Por provincias, León se sitúa a la cabeza con 48 fallecidos en este periodo, por delante de Ávila, con 30, de Burgos (28), y de Valladolid (26). En el lado contrario aparece Palencia (4), Soria (6), Segovia (9), Salamanca (14) y Zamora (17).

Además, según la información facilitada a la agencia Ical por la DGT, nueve de cada diez accidentes mortales con motocicletas contabilizados en este periodo se registraron en carreteras convencionales y el 52,2 por ciento tuvieron como factor concurrente la velocidad inadecuada. Después, pero a mucha distancia, aparecen la distracción y somnolencia, que estuvieron presentes en el 7,7 por ciento de los casos.

Sólo 8 de los 182 fallecidos no hacían uso de casco. Cabe señalar que desde el año 2013 todos los motoristas fallecidos hacían uso de casco.

Desde el 1 de enero hasta 24 de mayo de 2017 (datos provisionales) se registraron 5 motoristas fallecidos: 2 en la provincia de Burgos, 2 en León y 1 en Soria (4 de ellos por salida de la vía y 1 por colisión). El 60 por ciento de los fallecidos tenía como factor concurrente velocidad inadecuada. Todos los accidentes se produjeron en carreteras convencionales. Todos los fallecidos hacían uso de casco.

Las provincias con más 'puntos negros' para los motoristas -tres o más accidentes en los últimos diez años- son Ávila, Burgos, León y Salamanca, donde se concentran ocho tramos en los que desde 2007 se han contabilizado 33 accidentes mortales.

En el caso de Ávila las carreteras más peligrosas son la AV-905, entre los puntos kilométricos 12,2 y 23,6, con cinco accidentes; la N-502 (13,6-65,4), también con cinco siniestros, y la AV-902, entre los kilómetros 11,1 y 16,5, donde se contabilizaron tres accidentes.

En León los puntos más conflictivos se sitúan en la N-630, entre los kilómetros 90,5 y 153,7, con cinco accidentes, y en la N-625 (93,7 -106,9), con cuatro siniestros mortales, el último este mismo año. En Burgos también aparecen dos 'puntos negros', en la CL-629, con cuatro accidentes y la N-I, entre los kilómetros 162,9 a 255, con tres. Por último, en la provincia de Salamanca el tramo más peligroso se encuentra en la SA-220, entre los puntos kilométricos 1,9 y 36,9, con cuatro accidentes.

Turismoto

Para Jesús Manuel Navas, portavoz del club Turismoto de Valladolid, el encargado de organizar Pingüinos, la imagen del motorista “inconsciente y que circula a toda velocidad” ha cambiado radicalmente y los irresponsables que se comportan en la carretera como en un circuito de carrera son una minoría”.

No obstante, Navas argumenta que la falta de experiencia y de pericia está detrás de buena parte de los siniestros, por lo que echa de menos por parte de la DGT la organización de cursos y talleres en los que además de enseñar algunas técnicas, también se conciencie a los conductores noveles que en caso de accidente la parte más débil “eres tú”. Además, también advierte de que de mantenerse la falta de inversión en el mantenimiento de las carreteras la siniestralidad puede incrementarse notablemente.

Por su parte, el ex delegado del Gobierno en Valladolid Cecilio Vadillo, confeso amante del mundo de las dos ruedas, asegura que en los últimos años se han producido importantes avances en materia de seguridad vial, como la entrada en vigor del carné por puntos, pero apunta que es necesario seguir poniendo el acento en la educación para que “todos nos respetemos más en la carretera”.

Además, Vadillo también apuntó que en materia de infraestructuras queda “demasiado” por hacer, ya que después de unos años en los que se avanzó mucho en la colocación de quitamiedos dobles, ahora se ha detenido la sustitución de este elemento de seguridad que salva muchas vidas en caso de accidente de motos. En este sentido, también apuntó que se hace necesaria una mejor señalización e insistir en el mensaje de “cero alcohol y cero drogas al volante”.