La estación invernal Valle Laciana-Leitariegos ha inaugurado este domingo la temporada de esquí con una superficie esquiable de 2,9 kilómetros de nieve polvo y espesores de entre 20 y 70 centímetros. Por su parte, San Isidro prevé abrir sus instalaciones a lo largo de la próxima semana de forma progresiva y en función de la meteorología y las labores de acondicionamiento.
La nieve caída en las últimas jornadas ha permitido abrir a la estación lacianiega con cinco pistas y cuatro remontes. Por su parte, en la otra estación de titularidad provincial, San Isidro, continúa el temporal de viento y nieve. Los operarios de la estación trabajan para mantener limpios los accesos y la zona de aparcamiento, y en la adecuación de las pistas con el objetivo de abrir las instalaciones a lo largo de la próxima semana de forma progresiva y en función de la meteorología.
La temporada anterior las estaciones de esquí de la provincia vieron condicionada su actividad por los protocolos sanitarios por la pandemia del Covid, que exigían reducción de aforos. A día de hoy, la situación sanitaria permite abrir las estaciones sin esas restricciones. En todo caso, estas condiciones quedan sujetas a las instrucciones que puedan dar las administraciones sanitarias.