Los alojamientos turísticos del Bierzo hablan de un verano "ligeramente más flojo", con descenso de peregrinos y extranjeros

Tras la temporada alta los negocios hacen balance.

11 de Septiembre de 2018
Actualizado: 27 de Septiembre de 2018 a las 13:04
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La temporada alta llega a su fin. Aunque las buenas temperaturas se mantienen, el avance del calendario y la vuelta a las obligaciones marcan el fin del periodo vacacional para la mayoría. Tras las fiestas de La Encina, los alojamientos hosteleros hacen balance y las cuentas, para la mayoría, no reflejan un verano demasiado halagüeño.

En Ponferrada, se ha notado el descenso de peregrinos, algo que algunos negocios atribuyen al auge que están cogiendo otros recorridos como el portugués. También se ha notado el descenso de turismo extranjero en favor del nacional, aunque, matizan, los españoles hacen un menor gasto medio por persona.

El Hotel Celuisma ha mantenido una ocupación similar a la de años anteriores, rondando el 70%. El AC, en torno al 75% , maneja datos "un poco inferiores" a la temporada pasada.

Lo mismo ocurre en el Hotel el Castillo, donde la ocupación estuvo en julio en el 90% y en agosto en el 85%. Sin embargo, sostienen que septiembre y octubre suelen ser buenos meses "con la llegada de muchos grupos". Desde el Hotel Aroi señalan que los turistas han bajado, descenso que han notado más en el mes de julio, manteniendo en agosto datos similares al mismo mes del año anterior.

Turismo rural

Familia, parejas y pequeños grupos de amigos disfrutaron del turismo rural en la Comarca. Así, para La Peregrina, en Carucedo, ha sido un verano muy parecido al de 2017 con un 90% de ocupación en agosto y un 60% en julio en este paraje de Médulas. "El septiembre pasado fue muy bueno y aún esperamos tirón", matizan.

Para Casa Ana en Sésamo y Era Marina en Vega de Espinareda ha sido un verano "más bien flojo". En Era Marina registraron un 50% de ocupación en julio y llegaron al 90% en agosto.

Así mismo, desde Atudebial (Asociación de Turismo y Desarrollo del Bierzo Alto), se manifiestan más satisfechos con las cifras que en otros lugares de la comarca. Cuantifican la ocupación media en torno al 90%. No obstante, aquí el Camino de Santiago no tiene demasiado tirón aún, como señala el presidente de la Asociación, Andrés Torrente. Esperan también buenos registros para los meses de septiembre y octubre, "la gente sigue con la inercia del verano".

Donde ha caído estrepitosamente la ocupación rural ha sido en el Valle del Silencio, concretamente en Peñalba, donde han pagado el coste de los continuos desprendimientos sufridos en el vial de acceso.  Las casas rurales en julio han estado casi 'libres' diariamente.  Según los propietarios, en agosto los datos han mejorado ligeramente. Los promotores no han querido ofrecer datos concretos pero reaccionan con ironía preguntados sobre si la caída supera el 80% respecto a un verano 'sin desprendimientos' en la portada de los periódicos.