Los trabajadores del Transporte Urbano de Ponferrada (TUP) han desconvocado la huelga que habían anunciado de forma indefinida a partir del 31 de octubre. El motivo es la liberación por parte del Ayuntamiento de 298.000 euros destinados a pagar concetp de Amortización de inversiones para la adjudicataria del servicio (la UTE Aupsa-Begar), con los que podrá hacer frente al pago de tres nóminas de la plantilla. A pesar de ello, la representan del CSIF, Flor Pérez, advierte que es un aplazamiento "por el momento, hasta que tengamos una solución definitiva, porque la aportación del Ayuntamiento es temporal y en tres meses volveremos a tener el mismo problema".
El motivo por el que los trabajadores del TUP habían anunciado la huelga indefinida -que pretendían llevar a cabo tres días por semana-, era el impago de la nómina de septiembre, a la que se suma ahora la de octubre. Según la empresa, no disponían de liquidez suficiente para afrontar los pagos, debido a que el Ayuntamiento no ha abonado el servicio prestado durante el año 2017.
El servicio de autobuses de Ponferrada se encuentra en situación alegal desde el año 2012, cuando expiró el contrato suscrito en su día para su gestión con la empresa concesionaria, Aupsa-Begar, sin que hasta la fecha se haya conseguido elaborar y aprobar un nuevo pliego de licitación.
El TUP está generando un déficit anual del orden del millón de euros, que se afronta desde las arcas municipales con reconocimientos extrajudiciales de crédito. Para paliar esta situación, se ha puesto sobre la mesa la municipalización del servicio, una gestión directa que todavía se encuentra en trámites. Es más, este año los servicios jurídicos del consistorio ya han subrayado la nulidad plena de todo trámite destinado abonar el déficit de explotación correspondiente al año 2017 (hasta ahora ponían reparos de legalidad), por lo que los conflictos sociales en el servicio podrían regresar en invierno.