Los estudiantes del Bierzo realizan uno de los exámenes de Selectividad / Fotos de Víctor Alón.Un año más, las aulas del Campus de Ponferrada se han vuelto a llenar de estudiantes de Bachillerato que afrontan su última prueba antes de dar el gran paso a la universidad. Nervios, pero también confianza en pasar la Selectividad, que desde este martes hasta el jueves reúne a 426 jóvenes bercianos en las instalaciones de la ULE, en una prueba que suele arrojar resultados brillantes: en 2015, casi el 96% de los que se sometieron a la Selectividad en la comarca aprobaron. Ante la incertidumbre de en qué se convertirá la prueba el año que viene, los estudiantes han querido defender el actual modelo. "Aunque nos dicen que no va a cambiar mucho", explica María Martínez, profesora del Álvaro Yáñez que, gracias a su día a día con alumnos de Primero de Bachiller, sabe del respeto que estos tienen por la prueba. "Siguen pensando que es muy importante".
"Supongo que al final la LOMCE saldrá adelante", explica Luis Pérez, profesor del Bergidum Flavium de Cacabelos, a pesar de la inactividad política en el país. "Podría ser una prueba más exigente o incluso obligar a los alumnos a ir más lejos de su casa para hacerla". Los interrogantes, por ahora, son muchos más que las respuestas dadas, por lo que esta posible centralización de la Reválida de Bachillerato que comenta Pérez no es algo que se pueda descartar. "El de ahora es un formato que facilita muchos las cosas", defiende uno de los examinados del Beatriz Ossorio de Fabero. "Lo veo muy bien, así se hace una criba. Yo no lo quitaría", añade un alumno del Gil y Carrasco.
Entre las carreras deseadas por los alumnos para su futuro universitario destacan Económicas, Ciencias Políticas, Derecho y distintas Ingenierías, aunque también entre las opciones surgen otras titulaciones menos demandadas como Bellas Artes o Música. Muchas de estas titulaciones exigen a muchos bercianos mudarse a cientos de kilómetros de su hogar, aunque todos ellos lo aceptan e incluso lo prefieren. "Me gustaría irme, quiero vivir la vida universitaria", explica una joven del Bergidum Flavium a la que le gustaría hacer Medicina. En el mismo sentido se expresan otros jóvenes, en este caso del IES Padre Sarmiento y del Gil y Carrasco. Mientras el primero habla de necesitar "un cambio de aires" el segundo se queja, algo amargamente, de que "llevo mucho tiempo aquí".
Otros muchos desearían poder hacer aquí sus estudios, una opción poco probable debido a la escasez de oferta académica en el Campus de Ponferrada. "Si pudiera hacer aquí lo que quisiera y el centro tuviera buena fama me quedaría", asegura una estudiante del Álvaro de Mendaña. Un joven del Gil y Carrasco, por su parte, recuerda el desembolso económico que puede suponer para una familia que su hijo estudie fuera. "Me quedaría, mudarme supone un gran gasto".
En cuanto a los destinos más deseados por los alumnos, Salamanca es una de las ciudades más deseadas, tanto por su cercanía como por el prestigio de su Universidad. Otros nombre que afloran son Madrid, León, Oviedo, Gijón o el País Vasco. Muchas opciones para un futuro muy cercano, aunque por ahora "están centrados en la prueba de este año, no piensan en el futuro", indica el profesor del Gil y Carrasco Armando Magallanes.
María Martínez, del Álvaro Yáñez.