Mañueco afirmó este miércoles que en este momento la evolución “es buena, es favorable” en cuanto a la incidencia y la hospitalización de infectados en planta y en UCI.
El jefe del Ejecutivo autonómico también exigió al Gobierno que multiplique por cuatro las vacunas que llegan a la Comunidad, para poder acometer de forma masiva el proceso. En este sentido, recalcó la “esperanza” que abren estas vacunas, y recordó que Castilla y León está en la “vanguardia” en vacunación de sus ciudadanos.
Estas declaraciones se producen después de que ayer martes, el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, afirmase que las medidas extraordinarias que regían en Castilla y León ante la situación de la COVID-19 quedarán sin efecto a las 00.00 horas del lunes, 8 de marzo, cuando la Comunidad pasará a una fase cuatro de desescalada, lo que “permitirá recuperar determinada actividad económica y social, siempre bajo la sensatez, la prevención y la precaución y extremando las medidas”. El consejero hizo estas declaraciones por sorpresa ayer, a pesar de que el lunes el vicepresidente Francisco Igea presentó una desescalada por fases y por provincias que no se iniciaría hasta que cada provincia redujese la ocupación de sus UCIS por debajo del 25%.
En definitiva, el ejecutivo autonómico “da por hecho y espera” que el lunes “se den los criterios” para la apertura del interior de hostelería, gimnasios y centros comerciales.