Sin duda una iniciativa pionera en el mundo de la hostelería y de la comida rápida con la que se pretende disminuir los tiempos de espera de entrega de los pedidos y así satisfacer la ingente demanda de sus clientes deseosos de comer una porción de pizza.
El sistema que Pizza Hut planea poner en marcha consistiría en delimitar diversas zonas de aterrizaje, aprobadas previamente por el gobierno de Israel, como aparcamientos o grandes explanadas, donde los drones depositarían los pedidos, con el objetivo de que los clientes acudan a recogerlos a estas 'zonas de aterrizaje'.
Si todos los pronósticos se cumplen, la compañía espera poner en marcha esta prueba piloto en el mes de junio de este año, según han avanzado en un comunicado al diario The Wall Street Journal.
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El uso de este tipo de dispositivos permitirá a la cadena de restaurantes llegar a más de 7.000 hogares y sentar las bases de una nueva forma de entender el servicio a domicilio, por parte de las grandes cadenas de comida rápida.