Por ello, tras una segunda reunión con los vendedores, acordaron que los 120 puestos se reincorporarían al mercadillo el próximo miércoles día 15. Pero para que esta circunstancia se cumpla, el Ayuntamiento está trabajando "a marchas forzadas" para dar cabida a todos los puntos de venta de manera que se respeten las medidas de seguridad y la distancia reglamentaria. "Es un problema", reconoce de la Fuente, dado que conlleva mucho trabajo que hay que compaginar con otras tantas labores también ligadas a la nueva normalidad en el marco de la crisis sanitaria del Coronavirus.
En estos momentos, una topógrafa y un funcionario del Ayuntamiento ya recorren las calles donde se ubica el mercadillo y también otras aledañas para delimitar y marcar los puntos de ubicación de los puestos respetando la distancia de seguridad. En cualquier caso, matiza el concejal que se trata de 120 puestos de comerciantes del Bierzo, pero posteriormente de manera más paulatina se irán reincorporando otros ambulantes de zonas como Benavente y La Bañeza.
Y es que hasta este momento, el mercadillo de Ponferrada sólo contaba con puestos de productos alimenticios. En este sentido, Manuel de la Fuente reconoce que los ponferradinos se han adaptado ya a la nueva metodología del mercado, "aunque al principio costó un poco".
Finalmente, el edil pone sobre la mesa la acumulación de frentes abiertos que afronta la concejalía para ceñirse a las normas de seguridad de la nueva normalidad. La apertura de las piscinas y el acondicionamiento del auditorio municipal para acoger la programación de verano han sido otros de los aspectos que copan la agenda municipal en un periodo de adaptación que cambia constantemente.