Es probable que muchos, a través de los medios de comunicación, Internet o de alguna persona de vuestro entorno, hayáis oído hablar de la existencia de préstamos sin intereses ni comisiones. Dicho así, todo parece indicar que se trata de algo tan sencillo como recibir el dinero y pagar posteriormente, en el plazo contemplado, esa misma cantidad sin ningún coste adicional. Y, aunque hasta el más crédulo pueda extrañarse de algo así, en este caso es algo que se corresponde con la realidad.
Efectivamente, los préstamos sin intereses existen. Con la creciente competencia en el sector de los micropréstamos y microcréditos como causa principal, muchas entidades crediticias empezaron no hace mucho a ofertar este tipo de producto. Aunque, si bien es cierto que no hay ningún tipo de gasto oculto en el mismo, sí hay que tener en cuenta ciertas circunstancias que veremos a continuación.
Condiciones y requisitos: ¿qué necesito para acceder a un préstamo rápido sin intereses?
Antes de nada, repasaremos los requisitos generales necesarios para poder solicitar un préstamo sin intereses. En primer lugar, es necesario ser residente en España, además de ser mayor de edad y disponer de un documento de identidad (DNI o NIE) vigente. Por otra parte, de cara al ingreso del dinero, debemos poseer una cuenta bancaria a nuestro nombre. Y, por último, para poder estar en contacto con la compañía prestataria, hemos de tener un teléfono móvil y un correo electrónico.
A partir de aquí, el resto de condiciones estará sujeto al caso de cada empresa crediticia. Aspectos como demostrar o no ingresos periódicos (nómina, pensión, subsidio…), estar libre de deudas o la cantidad y plazos del préstamo dependerán de cada situación concreta.
¿Cómo puedo solicitar un préstamo sin intereses?
Los pasos para solicitar un préstamo sin intereses son fáciles, breves y apenas requieren de papeleo. Para empezar, es necesario tener conexión a Internet para acceder a la web de cada prestamista, donde tras elegir el importe del préstamo y el plazo de devolución, únicamente deberemos cumplimentar un formulario y enviar la documentación que nos pidan. El tiempo de espera para recibir la aprobación suele ser corto, al igual que el necesario para recibir los fondos en nuestra cuenta.
Ventajas y desventajas de un préstamo sin intereses
Entre las ventajas de estos préstamos, además del hecho de carecer de intereses ni comisiones, destaca la rapidez en la solicitud y en la tramitación, ambas en línea y sin incómodos papeleos. Asimismo, la recepción del capital solicitado suele ser también veloz, llegando a producirse en la mayoría de los casos dentro de las siguientes 24 horas. Por lo demás, estos productos pueden presentar ciertas condiciones ventajosas adicionales, que ya dependerán de cada caso particular.
En cuanto a las desventajas, empezaremos señalando que los préstamos sin intereses suelen tratarse de promociones para adquirir nuestro primer préstamo con la compañía en cuestión. A esto hay que añadirle que los importes máximos a solicitar no son muy altos. Además, el prestamista puede establecer la obligatoriedad de que dispongamos de un ingreso periódico y de que no aparezcamos en ningún fichero de morosidad.
Préstamos de 50 euros: ¿cómo funcionan?
Otro producto novedoso que cada vez atrae más demanda es el préstamo de 50 euros. Para solicitarlo, al igual que en el caso anterior, tampoco hay que moverse de casa, siendo sólo necesario poseer un dispositivo conectado a Internet para entrar en la web de la entidad prestataria. Una vez allí, tendremos que determinar los días tras los que devolveremos el dinero prestado, tras lo cual nos informarán del coste total de la operación. Después habrá que cumplimentar el formulario de solicitud, proceso que suele ser bastante ágil y sencillo.
Entrando en las condiciones, son básicamente las mismas que en la mayoría de otros tipos de préstamo. Poseer un DNI o NIE válidos, ser mayor de 18 años, residir en España, disponer de una cuenta bancaria a nuestro nombre y, en caso de no tener nómina, generalmente es necesario justificar algún otro tipo de ingreso periódico.
Poco después de enviar la solicitud, nos contestarán con la confirmación o denegación de la misma. En caso de una respuesta positiva al respecto, el importe prestado puede estar de manera casi instantánea en nuestra cuenta corriente. Sobre todo si escogemos una empresa crediticia que opere con el mismo banco que tengamos nosotros. Siendo así, podremos disponer de los fondos en apenas minutos.
A pesar de todas las ventajas comentadas, hay que puntualizar que estos préstamos de 50 euros a corto plazo suelen ir acompañados de tipos de interés más altos que otras clases de créditos. El motivo no es otro que cubrir todos los gastos que acarrean las gestiones. Por eso mismo, son una opción excelente para devolverlos en unos pocos días, minimizando así los costes asociados a los mismos. Sin embargo, si no vamos a poder reembolsar la cantidad total en un breve lapso de tiempo, quizá deberíamos plantearnos otras alternativas menos costosas.