Cuando los gérmenes, como por ejemplo el virus del Covid-19 invaden nuestro organismo, atacan nuestras defensas y se multiplican. Esta invasión provoca en el organismo una infección que es lo que desencadena una enfermedad en nuestro cuerpo.
A partir de aquí, nuestro organismo dispone de diferentes herramientas que actúan a modo de escudo para protegernos de las infecciones, como por ejemplo, los glóbulos blancos o inmunitarios que son los encargados de combatir las infecciones. Además, los glóbulos blancos los podemos agrupar en tres categorías diferentes:
- Macrófagos: Son un tipo de glóbulos blancos que se encargan de absorber y digerir los gérmenes. Como resultado de este proceso, los macrófagos dejan en el organismo los llamados antígenos que forman parte de los gérmenes invasores, los cuales, son identificados por el sistema inmunitario que envía una señal para que los anticuerpos los ataquen.
- Linfocitos B: Son otra tipología de glóbulos blancos cuya función es producir anticuerpos que se ocupan de destruir las partes del virus que dejaron atrás los macrófagos (antígenos).
- Linfocitos T: Son el tercer tipo de glóbulo blanco y su función consiste en atacar las células del organismo que ya han sido infectadas por los gérmenes. Además, este tipo de glóbulos blancos, se caracterizan porque tienen memoria, de tal forma que cuando un individuo que ha padecido una enfermedad vuelva a contagiarse con el mismo tipo de virus, los linfocitos T recuerdan como atacaron ese virus, en una ocasión anterior, y de esta forma consiguen proteger al organismo del mismo tipo de enfermedad.
¿Cómo funcionan las vacunas?
Todas las vacunas sirven para ayudar a nuestro organismo a desarrollar inmunidad frente a un virus que ataque nuestro sistema inmunitario, sin que tengamos que sufrir la enfermedad como consecuencia de la administración de la vacuna. En el caso del Covid-19 sucede lo mismo. Los diferentes laboratorios farmacéuticos que han iniciado una carrera con el objetivo de encontrar una vacuna que permita poner fin al coronavirus, la han desarrollado en base a diferentes procedimientos científicos dentro del laboratorio que permiten que podamos distinguir hasta 4 tipologías de vacunas distintas.
- Vacunas Covid con vectores virales: Este tipo de vacunas se basan en que contienen una versión modificada de otro virus (el vector) que se ocupa de darles instrucciones a las células de nuestro organismo. En este tipo de vacunas, el vector (no el virus que causa el COVID-19, sino otro virus, menos nocivo) acceda a las células de nuestro organismo y las emplea para fabricar porciones inocuas del virus que causa el COVID-19. Estas porciones se denominan proteínas Spike y se ocupan de generar una respuesta inmune en nuestro organismo que crea linfocitos T y B , cuya misión es combatir al virus si llega a infectar nuestro cuerpo. Las vacunas que usan este método son las de Oxford, AstraZeneca, y Gamaleya (Sputnik V)
- Vacunas Covid con ARN mensajero (ARm): Este tipo de vacunas contienen material del virus que causa el COVID-19, el cual enseña a nuestras células a crear una proteína inocua que es exclusiva del virus. Una vez que nuestras células copian la proteína, destruyen el material genético de la vacuna. A partir de aquí, nuestro organismo reconoce que esa proteína no debería estar presente y crea linfocitos T y linfocitos B que recordarán cómo combatir el virus que causa el COVID-19, si nos infectamos en el futuro. Las vacunas de Pfizer y Moderna son las que están basadas en este método.
- Vacunas Covid con virus inactivados o atenuados: Consiste en inyectar en el organismo una versión debilitada o desactivada del virus, muy similar a los métodos tradicionales de vacunación empleados para atajar a otros virus. Las vacunas desarrolladas por Sinovac/Butantan (Coronavac), SinoPharm, Bharat Biotec (Covaxin) han sido desarrolladas en base a esta tecnología.
- Vacunas Covid basadas en proteínas: Este tipo de vacunas incluyen porciones inocuas (proteínas) del virus que causa el COVID-19, en lugar del virus completo. Una vez administrada la vacuna, el sistema inmunitario reconoce las proteínas como ajenas al organismo y comienza a fabricar linfocitos T y anticuerpos. En el hipotético caso de que la persona que haya recibido la vacuna se infectara en un futuro, las células de memoria podrán reconocer al virus y se activarán para combatirlo. Las vacunas diseñadas por Novavax y Sanofi están basadas en este sistema.
¿Qué vacuna es más efectiva?
A continuación, vamos a explicar cuáles son las ventajas y desventajas de las principales vacunas que ya se están utilizando en nuestro país para inmunizar a la población. Algunos de los datos que vamos a tener en cuenta en esta comparativa son el nivel de efectividad, el número de dosis que se deben administrar de cada vacuna o desde cuándo han comenzado a administrarse en nuestro país.
Pfizer - BioNtech
- Primera vacuna aprobada por la UE
- Se administra desde el 27 de diciembre de 2020 en España
- Efectividad: 95%
- Número de dosis: Dos
- Tiempo que debe trascurrir entre la administración de las dos dosis: 21 días
- Almacenamiento: –70°C (ultracongelada)
- La vacuna de Pfizer-BioNTech se recomienda para personas de 16 años de edad o más
- Los grupos de población de mayores de 65 y 80 años solo pueden optar a vacunas de ARN mensajero, como la de Pfizer y Moderna.
- Este tipo de vacuna basada en ARN mensajero causan más reacción en personas que ya han pasado previamente la enfermedad
Moderna
- Segunda vacuna aprobada por la UE
- El 12 de enero de este año España recibió las primeras 35.700 dosis de esta vacuna
- Efectividad: 94,1%
- Número de dosis: Dos
- Tiempo que debe trascurrir entre la administración de las dos dosis: 28 días
- Almacenamiento: –20°C (congelada) y 30 días en refrigeración.
- La vacuna de Moderna se recomienda para personas de 18 años de edad o más.
- Los grupos de población de mayores de 65 y 80 años solo pueden optar a vacunas de ARN mensajero, como la de Pfizer y Moderna.
- Este tipo de vacuna basada en ARN mensajero causan más reacción en personas que ya han pasado previamente la enfermedad
AstraZeneca
- Tercera vacuna aprobada por la UE
- Se espera que la recepción de vacunas de AstraZeneca en nuestro país se produzca entre el 6 y el 8 de febrero.
- Efectividad: 76%
- Número de dosis: Dos
- Tiempo que debe trascurrir entre la administración de las dos dosis: De 10 a 12 semanas
- Almacenamiento: Refrigerada
- La vacuna de AstraZeneca está aconsejada para grupos de población con una edad inferior a 65 años.
- La administración de las primeras dosis de la vacuna de AstraZeneca se llevará a cabo sobre los siguientes grupos de población: profesionales sanitarios y sociosanitarios en activo no incluidos en los grupos 2 y 3, es decir, los que no son de primera línea y trabajan en centros y establecimientos sanitarios y sociosanitarios
- Según la publicación especializada The Lancet, la vacuna de AstraZeneca, además de reducir en un 100% la enfermedad grave, también impediría la transmisión del Covid-19.
Pendiente de aprobación por la UE
Sputnik V
- La vacua Sputnik - V es la primera vacuna registrada en el mundo y en más de 15 países.
- Pendiente de aprobación por la Agencia Europea del Medicamento.
- Efectividad: 91,6%
- Número de dosis: Dos dosis
- Tiempo que debe trascurrir entre la administración de las dos dosis: 21 días
- Almacenamiento: Refrigerada (entre los 2ºC y los 8ºC)
- Aconsejada para mayores de 18 años
- El Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya ha certificado a partir de un ensayo clínico que la vacuna Sputnik-V, también, es eficaz, en pacientes de más de 60 años, con un grado de eficacia superior al 90%.
Referencias consultadas:
OMS
Ministerio de Sanidad
CDC
The Lancet