Suárez-Quiñones, que presentó la política de transportes a dirigentes del PP de Castilla y León, junto al presidente del partido en la Comunidad, Alfonso Fernández Mañueco, respondió a las declaraciones del concejal de Empleo, Promoción Económica y Educación del Ayuntamiento de León, Javier García Prieto, quien valoró el acuerdo entre la Junta y el Gobierno, aunque consideró que esta medida “no soluciona el problema”, por lo que abogó por un acceso gratuito a todas las vías ”.
En ese sentido, el consejero destacó que se trata de un “gran acuerdo”, en línea con el alcanzado sobre la AP-1, entre Burgos y Miranda de Ebro, con una rebaja en ambos casos para los vehículos pesados tipo 2 de hasta el 75 por ciento. Además, apuntó que evitará el paso de unos 700 vehículos de este tipo por la N-120, lo que beneficiará especialmente a los vecinos de las localidades situadas entre León y Astorga.
También, garantizó que su departamento y el Ministerio de Fomento siguen trabajando para ofrecer una solución a la alta intensidad circulatoria que registra la travesía de la N-VI en San Rafael (Segovia). El consejero explicó que la solución, al margen del desvío, corresponde al Gobierno de España, lo que recalcó es un proyecto “complejo”, si bien Suárez-Quiñones añadió que se tratará de lograr una solución temporal.