El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, compareció este sábado en rueda de prensa para detallar las medidas contenidas en la prórroga del plan anticrisis que aprobará el Consejo de Ministros en reunión extraordinaria y que tendrán vigencia hasta el 31 de diciembre.
Así lo indicó Sánchez este viernes en Bruselas tras participar en la sesión de trabajo del Consejo Europeo, donde aclaró que desde el inicio de la invasión de Rusia a Ucrania, el Gobierno lo que “ha querido siempre” es “proteger” a “las familias, los consumidores y los ciudadanos” que son “vulnerables” como consecuencia del alza de los precios.
A su vez, apuntó que su Ejecutivo apuesta por apoyar a los sectores específicos “más afectados” y por hacer rebajas “selectivas” en determinados impuestos, como por ejemplo ha hecho con el IVA del precio de la luz para “amortiguar” de forma “importante” esta alza de precios, “al menos en lo que representa la factura de la luz” que pagan los ciudadanos.
De este modo, y como ya había adelantado Sánchez el pasado miércoles, se bajará del 10% al 5% el IVA en la factura de la luz. “Estamos amortiguando el efecto y los costes de la guerra. Pero la inflación está frenando la recuperación económica en nuestro país. Esta guerra ha producido una extraordinaria incertidumbre sobre la economía europea y española, y que nos lleva a aprobar medidas adicionales”, ha añadido el presidente del Ejecutivo, que se ha mostrado muy “consciente” de las dificultades que sufren las familias por el alza de los precios.
Es por ello que el Consejo de Ministros ha aprobado el decreto anticrisis, que supone un esfuerzo presupuestario de 9.000 millones de euros. En total, al final de año, el Gobierno habrá invertido 15.000 millones de euros en medidas extraordinarias.
Entre las nuevas medidas acordadas en el Consejo de Ministros, Sánchez ha anunciado la reducción en un 50% del coste de los abonos de transporte estatales, y del 30%, en los autonómicos, desde el 1 de septiembre. También el aumento del 15% de las pensiones de jubilación e invalidez no contributivas y una ayuda directa de 200 euros para trabajadores autónomos y desempleados que tengan bajos ingresos. Además, se limitará el precio de la bombona de butano. Y se creará un nuevo impuesto que gravará los beneficios de las grandes empresas energéticas, que entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2023.