El asesinato el pasado 3 de julio de Samuel Luiz en Coruña, un joven de 24 años golpeado hasta la muerte, ha levantado una oleada de indignación por una muerte que tiene rasgos homófobos; la investigación y detenciones aún están en marcha así que cada avance es noticia en prensa y televisión. Sin embargo, el tema vuelve a traer otra polémica que aparece de manera periódica entre ciertos medios generalistas como es el de relacionar gratuitamente la violencia y los videojuegos, aunque en un caso como este aparentemente no tenga ninguna conexión.
Ha sido el periódico El País el que ha publicado un artículo que ha incendiado las redes al hablar del asesinato de Samuel relacionándolo con diferentes problemas generalizados de la juventud actual, incluyendo la influencia de youtubers y videojuegos violentos como GTA y Fortnite.
El titular original, ahora editado, no podía ser más sensacionalista: "Caso Samuel: una agresión mortal colectiva como las estudiadas en chimpancés y alimentada con Fornite". Y a lo largo del artículo, se asegura: “Antes teníamos aquello de los dos rombos que señalaba los programas de televisión no aptos para menores, ahora no hay filtros. A cualquier hora, los chicos tienen ante ellos series y juegos hiperviolentos a los que están enganchadísimos, como Fortnite”. "Se nos viene encima un problema enorme, la gente no va a saber qué es ficción y qué realidad". "Nosotros crecimos llorando con Marco o viendo la relación de Heidi con su abuelo. Hoy, nuestros jóvenes tienen como referencia a youtubers que, a salvo en sus habitaciones, explican cómo matar en Fortnite, o cómo hacer en GTA para tener relaciones sexuales con una mujer en un coche y luego pegarle un tiro para quitarle el dinero. El 99% de los videojuegos consisten en matar, patear, reventar, asesinar... Y encima les dan puntos por ello. La mayor parte de los jóvenes saben discernir, pero perciben demasiada violencia. Tenemos un ministro que nos alerta sobre la carne, pero nunca se hace nada contra estas multinacionales de los juegos".
El recurrente tema de los videojuegos con cualquier noticia de violencia ha indignado a muchos jugadores, que lamentan cómo se desvía la atención a un entretenimiento que no tiene absolutamente ninguna relación con el asesinato de Samuel. En Twitter los mensajes se suceden:
Ya sabéis chicos, cuando un psicópata mate a una persona, culpad a Fortnite. No culpéis otros factores importantes como contexto de donde ha crecido, familias, traumas del pasado, homofobia, racismo etc.
Nah: el Fortnite pic.twitter.com/hzriJtgrzJ
— ALEX WHITE ? (@AlexWhiteES) July 14, 2021
-A ver, esto es fácil. Asesinaron a un chaval homosexual al grito de "maricón de mierda", por lo tanto el culpable es...
-No lo sé. ¿El Fortnite?
-¿E... El Fortnite? pic.twitter.com/m0pPIvXSCV
— Yogulado (@Supertramp9713) July 14, 2021
Primero la culpa era de los inmigrantes, luego de la izquierda, después de la mujer y ahora del Fortnite. Todo menos decir que el caso de Samuel es un crimen motivado por la homofobia porque sería admitir que quienes la practican en medios y en el Congreso son parte del problema.
— Gema MJ (@gmaemejota) July 14, 2021
La culpa es del Fornite.
La culpa es de las películas.
La culpa es de los juegos de rol.
La culpa es del rock.
La culpa es de cualquier cosa menos de una sociedad que tolera que se bombardee a sus ciudadanos con mensajes de odio.
— Ese gato vengador (@esegatovengador) July 14, 2021
-No hay cojones a relacionar el asesinato de Samuel con los videojuegos.
-¿Que no? pic.twitter.com/GsRdGH6ACH
— Bernat Castro (@Berlustinho) July 14, 2021
Entro en Twitter. Veo que "Caso Samuel" es TT... en la categoría "videojuegos". WTF. Hago click. Disappointed but not surprised.
Lo que sea menos echarle la culpa a la homofobia. Mañana el culpable será, yo qué sé, Tarantino.
— Álex Living (@AlexDying) July 14, 2021
En el caso Samuel es más fácil echarle la culpa al fortnite que a los políticos y personajes públicos que predican el odio.
— nelriveroooo ?? (@Neel49218077) July 14, 2021
—El Caso Samuel sucede claramente por los extranjeros.
—No lo eran.
—Bueno, por los de izquierdas.
—Tampoco lo eran.
—BUENO, A VER. POR EL FORTNITE.
—¿Y la homofobia?
—DE ESO NADA, ES POR LOS CHIMPANCÉS QUE SE DAN PALIZAS Y LOS ANUNNAKIS, SOY MONGOLO HASTA DECIR BASTA.
— Doctor Jekyll (@bicicletagris) July 14, 2021