La medida es resultado de la reanudación del suministro de carbón procedente de las explotaciones de Uminsa a la central térmica Compostilla II de Endesa en Cubillos del Sil desde el pasado viernes en virtud del contrato suscrito para los próximos 14 meses, hasta el 31 de diciembre de 2018.
El mineral ahora utilizado procede de los apiles generados entre enero y marzo del presente año.