El Rectorado de la Basílica de la Encina invertirá 13.300 euros con la ayuda de la Diputación de León para la ejecución de dos nuevos tramos de pasarela y para acceder al bajo cubierta y unas escaleras para subir a las fábricas de las bóvedas en lo que representa un nuevo paso en el proyecto de convertir la torre en un mirador, según publica en su edición de este jueves Diario de León.
La intervención también incluirá la supresión de los comederos de palomas, alumbrado, una puerta de acceso al bajo cubierta, la consolidación de muros de mamposterías y el refuerzo del hueco abierto en la primera fase de las obras, así como el tratamiento de grietas. Se trata de una nueva intervención de un proyecto dividido en ocho fases y que tiene como objetivo final convertir en mirador turístico una torre que el pasado 2015 cumplió 400 años de edad.
Habilitar una gran escalera y acondicionar un museo
El rector de la Basílica de la Encina, Antolín de Cela, se ha marcado este reto, lo que permitirá a la ciudadanía y a los turistas acceder a uno de los lugares más altos de la ciudad, desde donde se abre una perspectiva hacia buena parte de la comarca berciana. Para ello, cuenta con la colaboración de la Diputación Provincial a través del Instituto Leonés de Cultura.
Los trabajos comenzaron el año pasado con una primera fase, que se sustanció en la apertura de huecos en las fábricas de la torre y la reorganización de los accesos al interior y a la zona del bajo cubierta, una cuestión en la que ahora se incide en esta segunda fase. La intención es habilitar una gran escalera para accede a la parte alta, además de acondicionar un museo sobre la historia de la Basílica.