Tres viviendas afectadas por el incendio en Peñalba y la falta de cobertura telefónica 'alimentó' las llamas

23 de Octubre de 2019
Actualizado: 24 de Octubre de 2019 a las 20:43
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El incendio se declaraba a las 20.31h. de este miércoles. El origen estuvo en una casa en pleno casco urbano y se extendió a otras 2 casas más, donde por fin los bomberos pudieron mantenerlo.

Finalmente la vivienda que fue el 'foco' del incendio quedó arrasada y otras 2 anexas resultaron afectadas. En la extinción de las llamas trabajaron siete profesionales y cuatro vehículos, dos ligeros y dos pesados, del servicio municipal de extinción de incendios. El incendio quedó controlado a las 2:30 horas de la madrugada. Según explicó el responsable de los Bomberos, Olivier Bao, la estrategia de defensa contra el fuego se estructuró alrededor de tres líneas de protección, dos en los laterales y una en la parte trasera de la casa, donde el fuego ya había empezado a afectar a otra vivienda situada en un plano superior. Aunque pudieron contener el fuego en los laterales, los Bomberos no pudieron evitar que las llamas afectaran a cerca del 80% de la cubierta de esta segunda vivienda, que también sufrió daños por agua en el interior.

La falta de cobertura telefónica ha 'alimentado' las llamas, dado que los vecinos han tenido que desplazarse a un punto fuera de la 'sombra' de señal para pedir auxilio, en primer término a la Policía Municipal de Ponferrada, que después ha gestionado el aviso con el servicio de Bomberos, ya desplazados a la localidad. En todo caso, en todo ese tiempo las llamas han ganado ventaja a las viviendas contiguas. 





Así las cosas, el riesgo de que el fuego se extendiera por más viviendas estuvo presente y ha sido una seria amenaza a esta joya turística y patrimonial del Bierzo, en el corazón del Valle del Silencio y del entorno de la Tebaida berciana.

A causa del suceso, una vecina tuvo que ser trasladada en ambulancia por sufrir una crisis de ansiedad, pero por suerte no hubo que lamentar daños personales en un fuego cuyas llamas alcanzaron un tamaño reseñable sobre los tejados de la población.











Foto: César Sánchez (ICAL)

Foto: César Sánchez (ICAL)

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