Los frutales del Bierzo han recibido la alarma de la Estación de Avisos del Bierzo, concretamente serán los frutales con pepita (la pera y la manzana como productos con marchamo de calidad) de la Comarca los que puedan verse afectados por la infección de fuego bacteriano, causada por la bacteria Erwinia amylovora. De este modo, esta bacteria "una vez que ha infectado un árbol, de matarlo en pocas semanas", explican desde la Estación de Avisos.
El Fuego bacteriano de los frutales es una gravísima enfermedad, capaz de matar a un árbol afectado en pocas semanas. Está causada por la bacteria Erwinia amylovora y afecta especialmente a perales, membrillos y manzanos. No afecta a los frutales de hueso. Su irrupción en la Comarca se produjo en el verano de 2007 y motivó el arrancado de decenas de hectáreas en plena producción, lo que produjo una merma de la capacidad productiva y de mercado para este sector primario del Bierzo. Volvió con fuerza en 2010. Vigilancia y arrancado de los árboles afectados para evitar su propagación son la forma de combatirlo. Además, los restos deben quemarse.
La meteorología de este mes de junio, con lluvias y tiempo cálido, ha producido condiciones muy favorables para el desarrollo de infecciones de esta enfermedad.
Los síntomas en aquéllos árboles que están infectados son: ramas secas, con hojas marchitas que no se desprenden y que toman un color pardo-negro en los perales, rojizo-castaño en los manzanos y membrilleros.
Así pues, se recomienda encarecidamente a todos los fruticultores que revisen sus plantaciones en busca de árboles infectados y que procedan de la siguiente forma:
1. Podar y sanear cuanto antes los árboles afectados, arrancando aquéllos que ya no es posible sanear por encontrarse muy afectados. En árboles poco afectados, eliminar mediante poda las partes afectadas con chancros, hasta 40-50 cm más abajo del límite inferior del chancro. Para localizar el límite del chancro es necesario pelar la corteza de las ramas o tronco afectado, y localizar el punto en el que la madera se ve sana:
2. Desinfectar las herramientas de poda de árbol a árbol, limpiando con lejía rebajada al 50% (una parte de agua por una parte de lejía), con alcohol y posterior flameo de la herramienta, o con otros desinfectantes. Dejar secar al aire.
3. Quemar toda la madera enferma cortada y los árboles enfermos arrancados. Se recuerda que es necesario solicitar autorización para poder quemar, al Servicio Territorial de Medio Ambiente.
Cortar,arrancar y quemar los árboles enfermos es la única medida de control eficaz.
Mantener las plantaciones frutales sanas es tarea de todos, y además es una obligación, para conseguir minimizar la expansión de la enfermedad en nuestra comarca.