Comienza la campaña de la cereza temprana marcada por las heladas y las tormentas

Comienza una campaña de la cereza aciaga, marcada por la crisis sanitaria del Coronavirus y por unas inclemencias meteorológicas que se prolongarán en el tiempo

11 de Mayo de 2020
Actualizado: 21 de Mayo de 2020 a las 16:28
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cereza bierzo 650
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Cerezas Marca de Garantía del Bierzo afectadas por la climatología / Fotos: César Sánchez (ICAL)

 

Comienza una campaña de la cereza aciaga, marcada por la crisis sanitaria del Coronavirus y por unas inclemencias meteorológicas que se prolongarán en el tiempo. Respecto al estado de alarma actual, el director técnico del sello de calidad de la Cereza del Bierzo y de la Asociación Berciana de Agricultores (ABA), Pablo Linares, explica que no afecta a la agricultura al estar reconocida como actividad esencial. Así pues, el agricultor puede desplazarse a su finca con normalidad, dado que las restricciones y confinamiento no se aplican al sector, considerado de primera necesidad para mantener los suministros.


Además, “en la cosecha de la cereza no suele haber trabajadores, sino que es el propio agricultor quien se ocupa de la recogida”, apunta Linares, quien en cualquier caso matiza que quien necesite mano de obra “puede contratar sin problemas”. Todo ello, por supuesto, siguiendo las medidas de seguridad y protección, y manteniendo las distancias prudenciales entre trabajadores.


Otro aspecto que sí lacrará la campaña es la meteorología adversa. Para empezar, las heladas de finales del mes de marzo “pillaron el cerezo en plena floración”, lamenta Pablo Linares, algo que perjudicó un 40% o incluso 50% de la producción de las variedades tempranas, cuya cosecha comienza ahora. En cualquier caso, las variedades tempranas suponen únicamente un 10% de la producción de la Cereza del Bierzo. Pero entonces llegaron las tormentas y las fuertes lluvias de la semana pasada y que amenazan con persistir estas próximas semanas. “Esto va a afectar mucho, el agua es muy perjudicial”, lamenta Linares, aunque aclara que es pronto para cuantificar el daño en la producción.


A la espera de ver cuál ha sido el perjuicio real de las precipitaciones, desde la marca de garantía de la Cereza del Bierzo señalan que en la comarca hay 12 variedades de cerezos y cada uno de ellos tiene sus desarrollos y sus tiempos específicos. Es por esto que la meteorología puede afectar gravemente a cierta variedad temprana, pero en menor medida a las variedades de media estación, así como a las próximas colectas. “Es complicado hacer estimaciones”, insiste Linares.


Desde la certificación de la marca de garantía Cereza del Bierzo en 2016, sólo un 10% de los frutos recogidos desde la aprobación de la nueva figura de calidad se han podido certificar con el sello de garantía. En la primavera de 2017 las heladas arruinaron la cosecha, en 2018 fueron las lluvias las que estropearon la producción y en 2019 la climatología mermó considerablemente la cantidad de cereza recogida.

Con tres zonas principales de producción, en las riberas de los ríos Burbia, Cúa y Oza, la producción total de este cultivo en las más de 200 hectáreas de cultivo existentes en la comarca se estima en unos tres millones de kilos al año y su repercusión en la actividad económica se calcula en más de tres millones de euros. En los últimos años, municipios como Ponferrada o Corullón promueven la plantación de cerezos en sus terrenos para impulsar el despegue del último de los comensales en llegar a la mesa de los alimentos de calidad que se producen en la comarca del Bierzo. Aunque, tal y como insiste Pablo Linares, es pronto para aventurar la cantidad y la calidad de la campaña de 2020, que previsiblemente podría rondar en torno al 1,5 millones de kilos.