El otoño se despide el próximo martes, 21 de diciembre, y lo hace dejando los datos de lluvias más bajos en esta estación de los últimos 5 años. Y es que tanto en litros por metro cuadrado como en días de lluvia, las cifras han mermado en comparación con 2020 y más aún con respecto a años anteriores (hay que remontarse a 2017 para encontrar un otoño más seco)
Según los datos facilitados a InfoBierzo por la estación de mediciones meteorológicas Meteo Spyfly, en otoño de 2021 la lluvia acumulada fue de 148 litros por metro cuadrado, mientras que en 2020 las precipitaciones dejaron hasta 175,20 litros por metro cuadrado. Así, las lluvias acumuladas en otoño de 2020 se redujeron considerablemente en comparación al mismo periodo de 2019 (175,20 l/m²) y de 2018 (185,79 l/m²).
Entre el 21 de septiembre y el 17 de diciembre de 2021 El Bierzo ha recibido 27 días de lluvia, mientras que en 2020 fueron 35; en 2019 fueron 50 y en 2018 35, por lo que parece que fue 2019 el año en que las precipitaciones marcaron la tendencia fuera de lo habitual. El día más lluvioso del otoño fue este 7 de diciembre, con una acumulación de 27,60 litros por metro cuadrado.
En cuanto a las temperaturas, el día más caluroso de este otoño fue el 8 de octubre, con una temperatura de 28,30 grados centígrados. En consonancia, el día más frío de la temporada fue el pasado 18 de noviembre, cuando los mercurios se desplomaron hasta los -2,90 °C.
La temperatura media máxima del otoño de 2021 ha sido 16,91 °C y la temperatura media mínima se queda en 4,67 °C. En términos absolutos, la temperatura media fueron los 10,79 grados centígrados y la amplitud térmica media ha sido de 12,24 °C.
La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, Emilio Alvarez, subdelegado de gobierno de Valladolid y el jefe de Predicción de la Delegación de AEMET en Castilla y León, Jesús Gordaliza, presentan el resumen climático del otoño, el balance hídrico y la predicción estacional del invierno 2021-2022 en Castilla y León.Tiempo en Navidad
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) pronostica para Castilla y León unas fiestas navideñas pasadas por agua, con temperaturas templadas y sin nevadas en cotas bajas, mientras que la primera semana del año el tiempo se estabilizará, con temperaturas acordes para la época y sin precipitaciones.
El jefe de Predicción de la delegación de la Aemet en la Comunidad, Jesús Gordaliza, que hoy presentó las previsiones para el invierno, junto a la delegada del Gobierno, Virginia Barcones, adelantó que los pronósticos prevén unas fiestas de Nochebuena y Navidad lluviosas, pero templadas y con nevadas solo en cotas altas. En cambio, la primera semana del año será seca y más fría, con temperaturas normales para la época, pero sin que esos últimos días del año se esperen precipitaciones significativas.
Con respecto a la predicción en el primer trimestre del año, Gordaliza señaló que la temperatura media será cálida, mientras que en el noroeste de la Comunidad se espera un invierno seco, que será más más húmedo cuando más al este.

Por otra parte, Gordaliza también hizo referencia a un estudio de la Aemet, en el que se pone de manifiesto que las probabilidades de que este año se repita un temporal como ‘Filomena’ son de un 2%. De hecho, según aseguró “las probabilidades de que un suceso de esa magnitud vuelva a repetirse por segundo año consecutivo, descienden al 0,04 por ciento puesto que el periodo de retorno ronda los 50 años”.
Además, recalcó que en el caso de que volviera a repetirse, “estamos preparados, porque se predijo el 30 de diciembre de 2020 y se produjo el 9 de enero de 2021, y tuvimos diez días para prevenir lo que podía pasar”.
Mientras tanto, Virginia Barcones, se refirió a los meteorólogos y resto de funcionarios de la Delegación Territorial de la Aemet, 50 personas en total, de las que diez trabajan en predicción, como “el radar de la administración, porque son quienes con su trabajo, nos advierten de los fenómenos, de sus características y de sus probables consecuencias”.
A su vez, destacó que aunque su trabajo diario puede pasar “inadvertido”, es absolutamente fundamental y concluyó que “son la alerta que nos guía a los demás efectivos del Estado, especialmente durante la campaña de vialidad invernal, para planificar el trabajo, tanto de la Dirección General de Tráfico, su Guardia Civil, como de los profesionales del Área de Protección Civil de la Delegación del Gobierno, Demarcaciones de Carreteras, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y el propio Ejército, o la UME, de ser necesario”.

Otoño en Castilla y León
Por otra parte, la Aemet también presentó el balance climático e hídrico del otoño. La temperatura media registrada en los meses de septiembre, octubre y noviembre deja un balance de otoño normal en la mayor parte de Castilla y León, aunque en zonas del noroeste el carácter es de “periodo cálido” y en zonas de la mitad sur y sureste ha sido ligeramente frío.
La temperatura media en Castilla y León en el trimestre septiembre-octubre-noviembre fue de 12,4 grados, lo que le convierte en el séptimo otoño más frío de este siglo. El día más cálido fue el 6 de septiembre (temperatura media 23,3 grados) y los más fríos el 27 y 28 de noviembre (temperatura media 2 grados).
En cuanto a las precipitaciones, en el trimestre otoñal han estado en su mayoría comprendidas entre 138 y 210 litros por metro cuadrado, lo que supone un ligero déficit, un 4 por ciento, respecto al periodo 1981-2010, con un promedio de 25 días de precipitación apreciable.
No obstante, este otoño ha sido el octavo otoño más húmedo del siglo XXI. El balance global es de periodo normal, aunque en áreas del noroeste de la región y en el suroeste de Burgos y zonas limítrofes ha sido seco, localmente muy seco en áreas del Bierzo y de Sanabria, mientras que en la mayor parte de la Cordillera Cantábrica, en gran parte de las provincias de Ávila y Soria, en el noreste de Salamanca y este de Zamora, así como en el tercio norte y este de Burgos, ha sido húmedo o muy húmedo. De hecho, se han llegado a superar los 800 litros en áreas próximas al Puerto de Trueba.
Septiembre fue un mes muy lluvioso, el décimo desde 1951 y el primero del siglo XXI, mientras que octubre empezó siendo el más seco del siglo con dos episodios de larga duración sin precipitación: entre el 4 y el 15 y entre el 18 y el 27. Sin embargo, las precipitaciones generalizadas de los tres últimos días del mes lo evitaron. Destacaron en estos días las acumulaciones registradas en Sierra de Béjar, Sierra de Gredos y Valle de Tiétar. La estación meteorológica automática de Candeleda (Ávila) acumuló en este período 249 litros, sobresaliendo el día 29 con 140,6 litros