La torre del castillo del municipio berciano de Balboa, catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC), luce ya su nuevo aspecto tras las obras de protección que supusieron la construcción de una cubierta a cuatro aguas y el remate superior de los muros del adarve. Estas intervenciones tienen como finalidad permitir la protección del edificio frente a la acción de agentes atmosféricos y la habilitación en el futuro de un acceso a los diferentes niveles de uso originales, así como a la zona superior de la torre.
El secretario técnico del Servicio Territorial de Cultura en León, Avelino Crespo, visitó este jueves los trabajos y dio por cerrada la intervención, iniciada en septiembre del año pasado y financiada por la Dirección General de Patrimonio con más de 50.000 euros. Los trabajos corresponden a la cuarta fase de las actuaciones que se llevan a cabo en el castillo, unas obras consideradas como una “medida urgente con un grado de necesidad elevado”.
De acuerdo con el proyecto redactado por el arquitecto Fidel Ramón, el Ayuntamiento de Balboa es el encargado de gestionar el conjunto de intervenciones en el monumento, con aportaciones y subvenciones de otras administraciones. Como en anteriores ocasiones, las actuaciones se acompañan de un importante estudio e investigación de las características constructivas y de un análisis arqueológico e histórico de la fortaleza.
De esta manera, las memorias de los distintos proyectos reflejan los avances en el conocimiento general del castillo y amplían la documentación a medida que se encuentran restos de lo que antaño fue este enclave. Técnicos estudiosos de este tipo de edificios se encargan luego de interpretar estos datos para acometer las tareas de consolidación de la manera más rigurosa, basada en los estudios previos que requiere un BIC.
Estado de la torre antes de la intervención
